Batman el cruzado enmascarado

Por fin llegó la serie heredera de Batman The Animated Series y es una obra maestra.

No corren buenos tiempos para DC. Como parte de Warner ha sufrido los vaivenes de la fusión con Time, de la compra de AT&T y de la nueva fusión/adquisición con Discovery.

La deuda acumulada por el grupo es inimaginable 39.000 millones de dólares en este 2024 después de que David Zaslav (CEO) haya hecho todo tipo de recortes incluyendo cancelar el estreno de Bargirl, una vez ya rodada para obtener una exención de impuestos, así como cambiar la política hacia HBO de estrenos y la venta de contenido exclusivo a otras plataformas.

Fruto de este giro fue la cancelación de Batman El Cruzado Enmascarado que inicialmente era un proyecto de Matt Reeves (The Batman) JJ Abrams (Perdidos, Fringe) y Bruce Timm (Batman la serie animada) para HBO. Posteriormente se incorporó Ed Brubaker (Gotham Central/Fatale/Criminal), muy fan de The Animated Series, cuando solicitó escribir episodios y lo contrataron como productor ejecutivo y responsable del departamento de guionistas.

Era un proyecto muy goloso y después de una pugna por varias plataformas, fue Amazon Prime la que consiguió quedarse con ella.

El resultado es extraordinario.

La serie tiene una ambientación similar a la de Batman The Animated Series (Batman TAS), que a su vez es heredera de los cortos de Superman de los hermanos Fleischer, pero no es una continuación.

Está ambientada en Gotham en los años cincuenta, en los primeros tiempos de Batman. Sin embargo hay muchos cambios respecto a Batman TAS.

Son capítulos esencialmente autoconclusivos y escritos por grandes guionistas.

Así, el primero es de Bruce Timm y presenta a la Pingüina. En el cómic normalmente era el Pingüino pero aquí es ella, madre y con dos hijos que son dos joyas. El personaje es brutal y da muchísimo juego en una historia que, desde luego, no va sobre el amor materno.

El segundo episodio lo guioniza el gran Greg Rucka, compartió colección, mano a mano, con Ed Brubaker en Gotham Central, como él tuvo su etapa en Batman y tiene grandes cómics como The Whiteout o La vieja guardia.

Probablemente sea el que más me ha gustado, con una historia que es un completo  homenaje a las películas de terror. Aprovechan el personaje de Basil Karlo y su transformación en Clayface para crear una historia con un aspecto que recuerda al cine expresionista alemán pero también a las películas de monstruos de la RKO y a las adaptaciones de los cuentos de terror de Edgar Allan Poe que hizo Roger Corman, como el Pozo y el Péndulo, todo ello fantásticamente integrado en una historia de amor no correspondido y venganza en el Hollywood clásico.

Otro de los guionistas es el propio Ed Brubaker que escribe varios de los 10 capítulos de la serie, como el tercero con Bruce Timm con la presentación de Catwoman con el traje clásico, o el cuarto con la presentación de una Harley Quinn muy distinta de la que conocemos, sin «pastelito» ni Hiedra venenosa, sino una psicóloga con un lado de payaso psicópata.

Todos los episodios son sensacionales y cierra la serie la creación de Dos Caras, también obra de Brubaker.

La animación es extraordinaria, como decíamos, en la línea de Batman The Animated Series pero con las mejoras que se han producido en las casi tres décadas que han pasado. La recreación de la época, la iluminación, la fluidez de los movimientos o la coreografía de las películas es realmente soberbia y hacen que las historias se muestren en todo su esplendor.

No quiero olvidarme de la música orquestal que ambienta y acompaña muy bien las diversas secuencias, adaptándose tanto a los momentos más calmados como a la acción más salvaje.

En cuanto a los personajes, como por ejemplo la Pingüina, han sufrido bastantes cambios.

Hay algunos que funcionan muy bien, otros son meros cambios de skin, como en el caso de Flass que en Batman Año 1 era un hijoputa con aspecto de nazi y ahora es un hijoputa negro. No cambia nada más, es un puro cambio de pantone  que no introduce más matices que ver a un policía negro corrupto y matón con lo de racista que esto pueda conllevar. Desde luego no es un ejemplo muy edificante de inclusión.

Otros como Gordon o su hija Bárbara, cuesta más de ver porque tienen setenta años de historia detrás y el cambio es literalmente de color, no cambia nada más, no afecta en nada ser de otra raza. Supongo que esto viene heredado del Batman de Matt Reeves en el que Jeffry Wright hacía de Gordon y lo hacía muy bien. Un poco como el cambio del Coronel Furia desde que en las películas fue Samuel L. Jackson. Es verdad que antes apareció con ese aspecto en Ultimate Vengadores, pero fueron las películas las que fijaron su aspecto.

En cuanto a Barbara Gordon aún no es ni Batgirl ni mucho menos Oráculo y, como debió parecerles poco o daba poco juego que fuera bibliotecaria, es abogada. Se aprovecha muy bien el cambio y es un personaje estupendo que influye mucho en la trama.

Un cambio bastante radical es el de Bullock. No sé si será corrupto en otras épocas, pero lo recordaba como un policía que estaba bastante desencantado con todo y dispuesto a timar atajos en ciertas ocasiones, pero un buen policía. Aquí sí que cambia y mucho convirtiéndole en compinche de Flass.

Harley Quinn aquí es asiática y no tiene su chispeante carácter habitual sino que, cuando aparece vestida como polichinela, sigue siendo muy seria y sus métodos son para devolver a la ciudad lo que los ricos más codiciosos de Gotham se han estado quedando. Se convierte más bien en una anti heroína que en una villana loca.

En cuanto a Batman, es Batman. Esto es muy osado después de 74 años de historia del personaje y con visiones tan distintas pero, vamos, se entiende que es a grandes rasgos el Batman post-Dark Knight Returns, es decir vigilante y detective bastante hosco obsesionado con acabar con los criminales, con un Alfred muy en la línea de los Alfred que siempre le ayudan pero que son bastante sarcásticos. Está muy bien la parte de Bruce Wayne superficial y playboy que se ve muy poco normalmente.

El conjunto funciona genial. Lo mismo mucha gente se queja de que esos cambios y empiezan con lo de la inclusión forzada, que Harley no es Harley y no sé qué mandangas.

Para empezar la Harley Quinn actual de los cómics es muy distinta de la que creó el propio Bruce Timm, una secuaz loca perdidamente enamorada del Joker que es la que sale, por ejemplo, en El Escuadrón Suicida Isekai. Sin embargo, la actual es una anti heroína que tiene una relación con Pamela Isley, Hiedra Venenosa. Esto con Harley Quinn, que es un personaje con solo 32 años.

Además, valientes fans de Batman en particular y de DC en general están hechos si no conocen los Elseworlds. De hecho, el propio James Gunn, copresidente de DC Studios, dijo que todo lo que no sea canon se considerará parte de DC Elseworlds.

Los Elsewolds, Otros Mundos, son cómics que muestran versiones de personajes como Batman o Superman en otras épocas o situaciones. Muy famoso, por ejemplo, es el de Gotham Luz de Gas, de Brian Agustyn y Mike Mignola, dónde un Batman de la época victoriana persigue a Jack el Destripador.  Incluso tendría película de animación que comentamos aquí.  Otros son Superman Hijo Rojo (también con película), Liga de la Justicia El Clavo, Batman Terror Sagrado y muchos más.

Además, aunque no se sepa que Elseworlds vuelve a ser un sello en funcionamiento, en series como las del Arrowverso, en películas como la de Flash o en la trilogía de animación Crisis en Tierras Infinitas, por no hablar de los cómics, ¿no saben que hay miles de universos con versiones diferentes de los mismos personajes? A veces son pequeños cambios, otros son cambios enormes, como Tierra 3 dónde, en lugar de Superman, Batman y los héroes son los villanos los que gobiernan con Ultraman y el Sindicato del Crimen de América, oponiéndose a ellos Lex Luthor, el único héroe que sobrevivió.

Es decir, todos estos cambios no son más que licencias artísticas que colaboran para dar una visión distinta de un héroe del que se llevan contando historias desde 1940 y lo importante es que el resultado es de una calidad absolutamente excepcional.

En mi opinión, ver visiones distintas de Batman enriquece al personaje y nos permite a los fans disfrutar de historias nuevas y originales.

Los que protestan por esos cambios, sin embargo, me resultan bastante cortos de miras y en general sospecho de que sus verdaderas intenciones no tengan nada que ver con la supuesta pureza de la visión canónica del personaje sino más bien con su racismo, su machismo o su homofobia.

Peor para ellos, que no son capaces de disfrutar de una gran serie que, por cierto, ya tiene confirmada una segunda temporada.

Saludos fremen.