Warner Bros. Animation no baja el nivel en esta segunda parte de la adaptación de la Maxi Serie del genial Alan Moore y Dave Gibbons. Podéis leer la entrada dedicada a la primera parte aquí.
Mantiene lo que destacaba de la primera parte, el cuidado y el cariño que se ha puesto en esta adaptación. John Michael Straczinsky, el creador de Babylon 5, se ha preocupado de trasladar no solo la historia sino de adaptar los personajes, sus motivaciones y, sobre todo, los dilemas éticos y morales a los que se enfrentaban en el cómic de una manera fidedigna y fácil de comprender.
Habíamos dejado a nuestros héroes (¡ejem!) al borde de la tercera guerra mundial, con varios de ellos muertos, o encarcelados o exiliados.
La trama continúa ahora con la investigación de Rorschach, Búho Nocturno y Silk Spectre por el asesinato de El Comediante y los demás hechos que han conducido a dejarlos fuera de juego.
Es una fantástica la trama, sin duda, pero también lo son todos y cada uno de los personajes, siendo trasladados con gran fidelidad a la pantalla.
Watchmen siempre ha sido el espejo oscuro de los grandes héroes de Marvel y DC.
Por supuesto, el Doctor Manhattan sería Superman, supuestamente Batman sería El Búho Nocturno, aunque me recuerda más a Blue Beetle, a Ozymandias lo veo mucho más como Batman, Silk Spectre podría ser Canario Negro y a Rorschach siempre lo he visto como Lobezno. El Comediante, podría ser El Pacificador o el Castigador.
Digo esto aunque son una adaptación de los personajes de la Charlton: Rorschach es The Question, Dr. Manhattan es Capitán Atom, Búho Nocturno es Blue Beetle, El Comediante es Peacemaker, Ozymandias es Thunderbolt y Espectro de Seda es Nightshade.
Sin embargo, por su forma de actuar, están más cerca de los personajes de DC que los de Charlton.
Todos estos héroes bailan al son de uno de los más perfectos, manipuladores e inteligentes villanos jamás creados pero, sobre todo, ¿Es un villano?
Es decir, si eres un héroe pero matas a muchísima gente, eres claramente el malo.
Si eres el malo pero tu gran plan salva a millones de personas, entonces ¿Eres el héroe? ¿Aunque mates a muchísima gente?
Watchmen tiene una cantidad enorme de capas. Desde los diversos caracteres y razones para ponerse las mallas y salir a la calle a pegarse con otra gente que viste igual a cómo influiría en el mundo que hubiera un dios que caminara por sus calles.
Por supuesto, que los héroes se tomen la justicia por su mano, que de ahí viene la frase de ¿Quién vigila a los vigilantes?
Las personas buenas pueden hacer cosas malas y las personas malas pueden hacer cosas buenas, pero aquí, aunque vemos esto, aunque toda una gama de motivaciones y actos entre la bondad y la maldad en los personajes, va mucho más allá de eso.
Aquí tenemos a personas buenas que deciden hacer algo muy malo para que pasen cosas buenas. Tenemos a personas buenas que son capaces de aceptarlo por el bien mayor. Tenemos a personas malas que en cambio tienen unos principios más allá de las consecuencias de evitarlo. Tenemos a quién a perdido toda su humanidad y se guía solo por la lógica.
Alan Moore estuvo especialmente inspirado y creo un cómic que funciona como un reloj, que tiene una profundidad rara vez vista. Asombrosamente, esa complejidad está tan bien contada que resulta natural y es parte de la historia. Incluso momentos tan difíciles como el concepto del tiempo para el Dr. Manhattan se revela de forma gráfica entendiéndose con facilidad. Por supuesto, que Dave Gibbons sea un extraordinario narrador facilitó mucho esta comprensión de la historia.
Lo mejor, que todo esto, todas estas cualidades, esta profundidad, estas filosofías contrapuestas, están en la película igual de bien contadas, con un ritmo muy acertado y un apartado artístico que bebe enormemente del cómic y una animación acorde para que no se pierda nada de la esencia del mismo.
Como dije con su primera parte, puede ser la mejor adaptación de un cómic a película de animación.
El director Brandon Vietti (Batman, Una muerte en la Familia; Batman Capucha Roja, los dos notables) repite al frente de la adaptación pero esta vez codirige con Victon Heuck (Young Justice) y han hecho un grandísimo trabajo.
Aunque creo que el principal acierto ha sido el respeto al cómic y haber escogido a uno de los mejores guionistas de televisión, el ya citado Straczynski, para la adaptación.
Seguro que le ha ayudado los cerca de veinte años que lleva guionizando cómics fantásticos como Rising Stars o Midnight Nation, su interesante e irregular etapa de Spiderman o Thor, entre muchos otros.
El resultado es fantástico pero tiene la misma pega que la primera.
En Max, de Discovery-Warner, dueños de DC y los que han producido estas dos películas, eliminaron todas las películas animadas del Universo DC cuando la fusión y la posterior conversión de HBO a Max
Lo hicieron de la noche a la mañana y desde entonces no aparece ni una en el catálogo.
Pueden poner películas mediocres como El Señor de los anillos: La guerra de los rohirrim pero estas dos extraordinarias películas, no. Bueno, como digo, ni estas ni ninguna.
Así que si alguien quiere verla, tendrá que buscar canales alternativos a los oficiales. Merece la pena.
Saludos Fremen