Un año más se celebró el segundo salón de cómic más importante de España y no creo que se vayan a quejar de la afluencia de público. Tristemente se mantiene la reducción a tres días de Expocomic y es una pena porque no da tiempo a verlo todo.
Estuve ayer sábado . Para comenzar, la llegada. Es muy recomendable llevar las entradas pre-compradas porque las colas eran monumentales. Había una enorme cola de la que solo dejaban pasar grupitos en la verja de entrada, luego la enorme cola para comprar las entradas y una tercera enorme cola para acceder por fin a Expocomic, Es inevitable, pero quizá sí hay cosas que se pueden mejorar. Sugeriría para el año que viene que se habilitaran más puestos en taquilla y que en las horas puntas se usaran, cuando bajara la afluencia, los miembros del staff podrían irse a realizar otras funciones. Pero son colas muy largas y en diciembre. Ayer hacía buen día pero es bueno buscar formas para reducir el tiempo que el público está parado en el frío.
De cualquier forma, afortunadamente íbamos acreditados y podemos contarlo pero no lo sufrimos.
Al entrar me gustó la distribución que han realizado pues dividieron el salón en dos pisos. La parte de arriba para actividades varias. Por ejemplo estaba la embajada americana con cursos y becas así como representantes de editoriales USA para ver los portfolios de la gente. El siempre tentador stand de venta de originales, asociaciones de rol, zona para juegos de mesa, para jugar con ordenadores, muy pequeña respecto al año pasado, la verdad, y algunas exposiciones como la dedicada al nuevo álbum de Corto Maltés.
Se nota que tiene tirón Star Wars y Expocomic tenía tres exposiciones distintas, dos de ellas muy interesantes, dedicadas a Star Wars.
La que me pareció un anuncio disfrazado fue la de la academia de dibujo C-10 que va todos los años a Expocomic y siempre hacen cosas distintas para darse a conocer Incluso han llevado a actrices porno (?) El caso es que esta vez hicieron una exposición de Star Wars con dibujos de los alumnos. Pues vale.
Pero las que son una maravilla son las que dedicaron a un homenaje de los autores españoles a Star Wars y la dedicada al trabajo de Salvador Larroca en Star Wars: Darth Vader.
La primera incluye dibujos sensacionales de grandes autores que van des de Azpiri a Sanjulián pasando por Carlos Pacheco, López Espí, Sergio Ágreda, e infinidad más. Lo que me cabreó bastante es que los dibujantes participan con sus obras y en la exposición se cuelgan sus dibujos sin decir quienes son. Tienes que mirar la firma y rezar porque sea legible si quieres saber de quién es ese fantástico dibujo. Si no, te quedas con la idea de que hay gente que dibuja muy bien, que por lo que parece son dibujantes españoles, y que han captado el espíritu de Star Wars. Pero quiénes son es un misterio. Mal por eso, pero muy bien por la enorme calidad de la exposición.
La otra exposición también es sensacional. Salvador Larroca se ha convertido en un referente español de autor que triunfa en USA junto a Carlos Pacheco. Su magnífico dibujo ha cambiado ligeramente con este trabaja incluyendo influencias del puntillismo que quedan muy bien.
Además consigue dotar a los personajes de las película de expresividad mientras siguen pareciéndose a ellos. No parecen fotos superpuestas en el cómic.
Quisiera destacar que la gente del staff es muy amable y ayuda ante cualquier duda que haya.
El piso de abajo es enorme y parece un bazar persa. Es chocante que no haya demasiadas tiendas de cómic en proporción a las tiendas de merchandising que son legión. Hay tiendas de cómic por supuesto, pero muchas son de comics de segunda mano, que es uno de los alicientes porque puedes encontrar cosas que no encontrarías de otra forma y a buenos precios. Pero tiendas de comics que vendieran las novedades, muy pocas. Esta año ya no estaba Generación-X, que había estado en todas las ediciones, ni ninguna de las grandes librerías de Madrid.
En cuanto a editoriales, estaba Aleta Ediciones, Dolmen Editorial, Astiberri, Dibbuks y Norma Editorial. También tenía un pequeño stand Ponent Mon y aproveché para acercarme a ver que tenían porque están reeditando la obra del gran Antonio Hernández Palacios y presumen de hacer un gran trabajo a 38 € el tomo «Casi precio de coste» me dijeron. Bueno, estoy dispuesto a dejar que me regalen tomos tan extraordinariamente caros si merece la pena. Desgraciadamente esta gente hace una edición correcta pero inferior a las iniciales. A mi enfado monumental por la tremenda chapuza que fue la edición de «Manos Kelly» «La hemos agotado» me dijeron, y un tercio del cómic lo publicaron en blanco negro, como contaba aquí, vi las ediciones de McCoy y El Cid. Parece bien hechas y fieles pero las de McCoy son más pequeñas que el standard del álbum europeo que es en el que se publicaron en España originalmente y el integral de El Cid, posiblemente la obra cumbre de Palacios, es considerablemente más pequeño porque la edición original de Ikusager era incluso un centímetro más alta que la de un álbum de Norma, por ejemplo. Las explicaciones la verdad es que fueron bastante patéticas («no se podía publicar en color», la labor editorial aunque ha mejorado mucho hace que el tamaño del libro tenga que ser este») y, a pesar de preguntar con educación vi que el hombre se molestaba. Lo siento mucho pero si me vendes que algo es la edición definitiva y me cobras el precio de ello, 38 €, por lo menos que la sea y que los cómics previamente publicados y que puede encontrar de segunda mano a precio de saldo no sean mejor que lo que intentas venderme. Tampoco tenían ni idea de cuantos tomos serían los de MCCoy, que es una serie y que si no tienen previsto terminarla ni saben cuánto será influye en empezar o no a comprarlo. En fin, que muy satisfecho con ellos no terminé, la verdad.
Después de eso lo que ya hay es merchandising. Mucho de anime y manga aunque mezclado con series películas, superhéroes, alguna tienda de videojuegos, montones de figuras, de camisetas y de tazas.
Namco Bandai tenía un gran stand en el que había cola para jugar a Dark Souls III, un Star Wars Battlepod, Naruto y algún juego más.
Encontré también una tienda, Fantasy Sword, que vendía reproducciones de espadas clásicas de los juegos, sobre todo de anime y manga, a tamaño natural. Por ahí tenían la espada-llave de Kingdom Hearts y de muchos mangas. No me convenció mucho la factura de las mismas excepto la de Michone que me pareció que estaba muy bien hecha. Los precios eran realmente buenos, entre 40 € y 50 €
El elenco de autores de este año ha sido muy interesante. Apenas puede ver a Azpiri y David Baldeón porque ha coincidido con un fin de semana plagado de obligaciones y compromisos personales, pero ha habido un magnífico elenco de autores, como en los últimos años no muy amplio en cuanto a autor extranjero con la excepción de Brian Azzarello (100 balas) destacando sobre los demás, pero con muchos autores nacionales de repercusión internacional, como el propio Salvador Larroca, el magnífico Pepe Larraz (Kanan, el último Padawan, el gran Pasqual Ferry (Héroes de Alquiler) o Rubén Pellejero que acaba de resucitar a Corto Maltés junto a Díaz Canales (Blacksad) entre muchos otros.
La parte del Cosplay es uno de los atractivos, hoy se celebra el concurso y merece la pena, el nivel al que se está llegando es altísimo.
En cuanto a público va desde adolescentes a abuelos sin olvidar a bebés que van con sus padres. Parece que el futuro del cómic está asegurado y que expocómic tiene tirón.
Además me llevé una agradable sorpresa porque me encontré a mi prima política con unos amigos y nos titamos un buen rato charlando. Esas conversaciones que no se pueden tener con la gente «normal» porque te empiezan a mirar raro.
No obstante hay cosas que me preocupan bastante y que creo que se debería intentar mejorar.
Lo primero: Es un salón de cómic a nivel nacional. ¿Cómo puede ser que las tres principales editoriales de comics de superhéroes no estén? Porque ni Planeta, ni Panini ni ECC tienen stand allí y creo que es un error garrafal que no estén, para ellas y para el salón.
Segundo: Las librerías de cómics no van. Algo falla para que teniendo un público potencial de 30.000 personas en estos días no quieran estar allí y el salón en buena medida pierde el sentido como salón del cómic si no puedes comprar los mismos cómics que podrías en una librería, aunque lo normal sería que puedas comprar más, pero no menos, pero no había nada de Marvel y muy poco de DC, solo en la parte de Época distribución que compartía en el stand de Norma.
Tercero, las colas, no se pueden evitar pero sí reducir, como decía, aumentando el número de gente atendiendo en taquilla.
Por lo demás, es una buena expocómic, mejorable pero interesante y que merece la pena ir.
Al final, apenas compré nada. Un TOTORO y las tazas que reproduzco abajo.
Saludos fremen.
Ya llevo tres años perdiéndomelo, menos mal que hay quienes como tú, detallan el cómo ha sido organizado.
¿Cómo puede ser que no fueran librerías de comics? Eso me ha dejado un poco dislocado…
Buena crónica colega! 😉
Sí, es algo que me tiene perplejo pero no es de ahora. Cada año se ha ido reduciendo el número de librerías de cómics que iban. Recuerdo que hace años se quejaban por la competencia desleal de las propias editoriales que vendían directamente sus productos allí y en muchos casos les llegaban tarde las novedades. Imagino que no les sale rentable.
Saludos fremen.