En los años 90, hubo un gran cambio en los videojuegos. No fue en los géneros, o no solo, sino en el hardware, concretamente en el soporte en el que se publicaban los juegos. Los carísimos y limitados cartuchos contaban con 32 Mb o 64 Mb como muchísimo, aunque Paprium llegó a los 80 Mb y Neo – Geo era otra historia pero para un sector muy pequeño de los jugadores. Cuando salió el CD con 650 Mb de tamaño, más adelante 700 Mb, el primer efecto fue en el sonido que pasó de estar enormemente comprimido a poder utilizar bandas sonoras orquestadas.
La otra gran diferencia fueron los gráficos. De repente se podían utilizar cinemáticas más amplias y trabajadas e, incluso, imágenes reales.
¡Actores reales! ¡Imágenes como no se habían visto en un videojuego!
Y nacieron los juegos FMV (Full Motion Vídeo).
Hubo una avalancha de ellos, algunos de los más famosos son Night Trap, muy polémico, que recientemente cumplió 25 años y tuvo una reedición, Under a Killing Moon, Expediente-X, Phantasmagoria, o The 7th Guest entre decenas y decenas.
El resultado era en la mayoría de los casos horrible, juegos muy encorsetados con muy pocas opciones reales para jugar, eran más bien películas interactivas y con actores y valores de producción bastante bajos.
Murió muy rápido porque enseguida llegaron los gráficos 3D y los jugadores y juegos apostaron muy fuerte por esta deriva.
Como la historia es circular, recientemente se han redescubierto los juegos FMV y Sam Barlow dio con la clave con Her Story, continuó con Telling Lies y recientemente se coronó con Immortality.
Esto ha supuesto que hayan adquirido cierta capa de prestigio mezclada con nostalgia y hayan surgido nuevos juegos FMV como este Press X to not die.
La premisa del juego es que hay un montón de lunáticos atacando a la gente, pero si pulsas el botón adecuado a tiempo te salvas. Es decir, recuerda a los juegos de los 90 pero si antes decíamos que los valores de producción no eran demasiado altos en muchos de ellos, aquí son extremadamente cutres.
El juego es tremendamente lineal, como si de un corto de zombies rodado por unos colegas se tratara. La historia comienza con alguien intentando atacarte, porque se juega en primera persona y si pulsas a tiempo la X te salvas. A partir de ahí pululas por tres o cuatro escenarios más mientras vas a buscar a tu pareja, tienes que elegir respuestas a preguntas y seguir con los QTE para no morir. 30 minutos después el juego se ha acabado pero ya ten dicen que trabajan en una segunda parte.
A ver, tiene momentos simpáticos pero está tan mal hecho y es tan enormemente lineal, tan encorsetado, que no puedes ni desplazarte, solo ver lo que pasa en la pantalla, elegir una opción o pulsar el botón correspondiente, nada más. Recuerda todo lo malo de los FMV de los años 90 porque es peor que muchos de ellos.
El juego se ha rodado con una Go Pro en primera persona y la calidad de la imagen es bastante lamentable también.
Se pueden elegir dos niveles de dificultad y conforme vas jugando vas sumando puntos, como las aventuras gráficas de Sierra. Si mueres o si cambias a la dificultad fácil te baja los puntos, supongo que buscando que lo puedas re-jugar. En una primera partida vi el 40 % del juego, por ejemplo pero es tan malo y la historia tan tonta, que no dan ganas de volverlo a jugar.
¿Lo mejor? El precio, por debajo del euro a día de hoy y que es muy corto porque si no se haría tedioso enseguida.
Creo que no jugaré la segunda parte y creo que los FMV están muy bien en el recuerdo.
Saludos fremen