Es estupendo que Warner esté haciendo películas de personajes más variados que Superman, Batman o la Liga de la Justicia, que acumulan una cantidad importante de películas de animación, y que hayan realizado una dedicada a Deathstroke.
Mi primer contacto con el personaje fue también su primera aparición en Los Nuevos Titanes. En los 80 a los cómics de DC no les iba demasiado bien. Venían de haber sido publicados por Bruguera cometiendo todo tipo de tropelías y, mientras que Marvel había caído en manos de Cómics Forum y se empezaba a publicar mucho mejor que hasta entonces, DC cayó en manos de una editorial que no conocía, Ediciones Zinco.
En sus primeros tiempos Zinco no tenía ni correo ni ninguna sección, únicamente el cómic en un formato más grande y con más páginas que el americano. Sacaron varios cómics como Batman, por supuesto, y luego series inéditas en España como Camelot 3000, Omega Men y Los Nuevos Titanes que rápidamente se convirtió en mi serie favorita. Apareció por primera vez en el número 2 con el nombre de «Deathstroke The Terminator», aquí traducido como «Golpe Mortal El Exterminador». Supongo que posteriormente cambiarían el nombre por evitar confusiones.
Aunque era un villano, un asesino, tenía una complejidad mayor de lo habitual. No quería dominar el mundo y tenía su propio código del honor. Era un personaje de lo más interesante como tantos otros que crearon Marv Wolfman y George Pérez, como Trigon, el Hermano Sangre o H.I.V.E.
La película precisamente cuenta cómo lleva Deathstroke años siendo un mercenario mientras su familia, su mujer y su hijo, no saben nada de esto.
Hablando de hijos, el primer hijo de Slade Wilson se llamaba Grant y fallece luchando contra los Titanes. Todo esto lo omiten en la película y ya presentan la familia con el segundo hijo, Joseph Wilson, posteriormente Jericho.
El conflicto entre Slade y HIVE tendrá consecuencias para su familia, separándola y teniendo que luchar por recuperar a su hijo, con alguna sorpresa bastante grande.
La película está muy bien. Warner entendió la idiosincrasia del personaje. Tiene un código de honor, pero no incluye ningún problema con matar y así se traslada a la pantalla. La hemoglobina chorrea por media pantalla, miembros cercenados, cabezas voladoras, de todo hay mientras se desarrolla esta historia de venganza y familia. También, puede que por primera vez, trata la infidelidad y la paternidad fuera del matrimonio, pero nada de dramón de sobremesa, sino al estilo superheróico: las consecuencias no suelen arreglarse hablando.
La animación, la misma que criticaba en Superman Red Son y en realidad la misma que lleva Warner utilizando desde hace muchos años. Por ahí no hay nada que aplaudir.
Pero sí el ritmo. la historia y el carisma de los personajes.
Una película muy recomendable se sea o no fan del personaje, pues no es necesario saber nada de él, todo se cuenta en la cinta.
Si queréis saber más sobre la película, el 12 de Septiembre hay un panel dedicado a ella en el evento DC Fandome explore the Multiverse. Concretamente el sábado 12 a las 19.00 h y el domingo 13 a las 19 h también.
Saludos fremen