Streets of Rage 4

 

Después de veintiséis años tenemos un nuevo Streets of Rage. Ya no lo hace Sega con Ancient sino que es Dotemu con Lizardcube y Guard Crush los encargados de dar nueva vida a Axel, Blaze y compañía. 

Tenía muy reciente la tercera parte que terminé unos días antes de que saliera el nuevo juego y estaba deseando ver si habían muchos cambios, si las sensaciones se mantenían, que novedades habría en una saga que viajaba cuarto de siglo al futuro.

La principal novedad de la historia es que nuestro persistente enemigo, Mr. X ya no está pero ahora sus hijos, los gemelos Y quieren controlar la ciudad y ahí vamos nosotros a intentar evitarlo. 

La historia no es muy allá, pero está más en la línea del tercero que de los dos primeros en los que Mr. X ya controlaba la ciudad y punto. En el tercero había una trama de robots que sustituían al alcalde y en este en lugar de a través de Robots es a través de la música.

 

El Game Award por el guión no se lo lleva, eso seguro, pero es lo de menos porque lo importante es cómo está contado y si es divertido. Vaya por delante que sí, que mucho. Vamos avanzando cada fase hasta que llegamos al jefe final que hay que derrotar.  En cada fase hay muchos enemigos de los anteriores pero también muchos enemigos nuevos. Es de lejos el que más variedad de enemigos tiene.

En este aspecto, hay que destacar que tenemos jefes clásicos como Shiva o Barbon junto a jefes nuevos con ataques bastante variados y los hermanos Y tienen una transformación una vez les has atacado lo bastante. Al ser el juego con más fases 12, también es el que más jefes finales tiene.

 

Los movimientos en esencia son los clásicos de siempre, aunque incluye un ataque especial que se consigue recolectando estrellas en el escenario y que causa daños a varios enemigos a la vez,  pero los personajes cambian. Los ex detectives Axel Stone y Blaze Fielding unen fuerzas con la hija de su viejo amigo Adam, Cherry Hunter, junto con Floyd Iraia, un aprendiz del Dr. Zan. Además hay personajes desbloqueables y versiones de los personajes de los anteriores juegos y con sus ataques y movimientos propios. Que no es que hayan variado mucho, pero por ejemplo en Streets of Rage 3 Blaze podía rodar en vertical y eso se mantiene en su versión pero no en la de Streets of Rage 2, por ejemplo. 

Hay que tener en cuenta que los Streets of Rage de los 90, los tres, aguantan fenomenal el paso de los años. Gráficamente eran lo más avanzado de la época y dada la moda del pixel-art, estamos más que acostumbrados a apreciar este tipo de gráficos. Las mecánicas que es lo que habría envejecido peor se mantienen imbatibles aunque hay algún detalle que se ha pulido para la actualidad y que agradezco.

Para empezar, Dotemu ha querido hacer un juego que pueda disfrutar todo el mundo. No solo tiene distintos niveles de dificultad sino que, si te quedas sin vidas te da la posibilidad de reiniciar la fase con más vidas o más estrellas (que permiten un ataque especial) pero a costa de tener una menor puntuación.

Además, si te quedas sin vidas no tienes que empezar el juego desde cero sino que cada fase que terminas se guarda la partida y, además, inicias la siguiente fase no solo con la barra de vida completa sino también con todas las vidas, aunque hubieras perdido alguna en la anterior. 

Seguramente sea el Streets of Rage más accesible de todos pero, si quieres, tienes la posibilidad de jugar el modo arcade: una única vida para pasarte el juego entero. 

También tienes otro modo para luchar solo contra los jefes finales. El modo clásico de luchar uno contra uno también está en este Streets of Rage. 

Cuando terminas el juego tienes la posibilidad de elegir la fase que prefieras lo que está muy bien, por ejemplo, para buscar los huevos de pascua, como enfrentarnos a los jefes de otros Streets of Rage, por ejemplo.

En cuanto al apartado gráfico me parece maravilloso, es una reinterpretación de los Streets of Rage que no se ha quedado en lo fácil de acudir al pixel art sino que lo ha diseñado con una estética tipo cómic que le sienta de fábula. Una gran evolución desde los primeros vídeos que circularon al maravilloso trabajo que han hecho, con unos decorados llenos de detalles en general y de detalles para el fan de la saga en particular. Muchos guiños escondidos que no molestan ni distraen pero alegran cuándo los descubres.

Además, el amor a la saga está por todas partes.

Por ejemplo incluye una amplísima galería con diseños de los personajes, de los enemigos o de los escenarios como extras. 

Aunque lo que más me ha gustado y que me ha parecido un detallazo enorme es la posibilidad de poder jugar el juego con un estilo retro pixel art años 90 y, además, si quieres con un filtro de televisor de tubo.

Por supuesto, otro detalle es la impresionante banda sonora. Está realizada por Olivier Deriviere (A Plague Tale: Innocence) mientras que las composiciones contra los enemigos finales son temas del gran Yuzo Koshiro, que había realizado las bandas sonoras de los anteriores Streets of Rage junto a Motohiro Kawashima, que también está. Además ha contado con otros compositores de una talla inmensa como Yoko Shimomura (Street Fighter II) compositora del tema de Shiva, Hideki Naganuma (Jet Set Radio), Keiji Yamagishi (Ninja Gaiden) o Harumi Fujita (Ghost and Goblins) para la música de los enfrentamientos a los jefes finales.

Pero, si la vena nostálgica es demasiado fuerte se puede cambiar a banda sonora Retro y lo que sonarán serán los temas de Streets of Rage 1 y 2.

En mi caso no lo he cambiado porque me parece magnífica.

Diferencias de versiones

Sorprendentemente, la versión para PC de Game Pass tiene algunas limitaciones respecto a las versiones de Steam, PS4 y Switch.

Estas últimas tienen la posibilidad de activar tres filtros, uno llamado fulgor que añade un poquito de brillo, pero los más interesantes son el modo retro, que deja a los personajes pixelados y el tele retro, que además pone las 625 líneas de los televisores de tubo.

Además, la versión de Steam tiene una amplia variedad de comandos que toquetear para cambiar la calidad de los gráficos que no está incluido en la del Game Pass.

No es algo importante, son detalles, pero no deja de ser curioso.

Menos divertido es lo que tarda en arrancar el juego en el Game Pass. 1 minuto y cinco segundos antes de que aparezca la pantalla de presentación. No es algo terrible, pero es que la versión de Steam tarda 9 segundos de reloj en estar en la pantalla de presentación. 

No es habitual esto de comparar las versiones de PC pero tengo esta posibilidad gracias a Limited Run Games.

Un día debería hacer una entrada dedicada a aquellos que abusan de los nostálgicos y Limited Run Games tendría un apartado para ellos solitos. 

El caso es que sacaron una edición coleccionista  que viene en una caja especial con una copia física del juego, en este caso para Switch,  con carátula reversible, un Steelbook y una carcasa inspirada en la caja de los juegos de SEGA Genesis que guardará todo el contenido con el juego.  Aparte de lo anterior, incluirá un póster de 18 × 24 pulgadas, un CD con la banda sonora original, un libro de arte, un cartucho de metal grabado con los personajes del juego, un pelota antiestrés con forma de platillo de pollo y una estatua de 7 pulgadas con las figuras de Alex Stone y Blaze Fielding, dos de los personajes originales de la serie. Todo esto estará dentro de una caja con arte del juego.

 

Abrieron dos horarios el 1 de Mayo para conseguirlo y en el primer intento no fue posible, un fallo con Paypal y ya no hubo oportunidad, en seis minutos estaba todo vendido,  pero en la segunda ventana a las 12 de la noche sí que lo conseguí, aunque si la edición de coleccionista no tenía mal precio, 149 $, los gastos de envío son criminales, 62.99 $ y armándome de paciencia porque avisaban que tardarían de dos a tres meses.

Seis días después me llega un email en que me cuentan que mandaban una clave para el juego en Steam para que me entretuviera mientras tanto porque no esperaban mandar el juego antes  de Otoño debido a los tiempos de producción de la estatua combinados con la situación actual de pandemia.

La verdad, es un detalle que hayan regalado el juego para compensar el retraso, ya sabía que Limited Run Games hace magníficas ediciones pero tiene gastos de envío muy caros y suelen tardar muchísimo, pero no suelen compensar por eso.

Espero que con el éxito cada vez mayor que tienen vayan mejorando y consigan mejores acuerdos de envío.

El caso es que al final  me encontré con las dos versiones y para Otoño, espero, tendréis el Unboxing de esa preciosa edición.

 

Mientras tanto, no dudéis en comprar el juego, es un grandísimo beat’em up, a la altura de los mejores, sumamente rejugable y si lo cogéis en PC hay versión sin DRM en GOG.com pero en Steam incluye Steam Remote Play y eso tiene de bueno que puedes jugar con cualquier amigo y basta con una sola copia del juego. Aunque la mejor forma de probarlo es sin duda el Game Pass. Está en el de PC y en el de Xbox y con la promoción actual de Xbox Game Past Ultimate cuesta 1 € el primer mes. 

Saludos fremen