Cine en píldoras

Nueva selección de películas que abarca de comedias a thrillers, de animación americana a nipona, de clásicos pre-código Hays a mega-taquillazos actuales.

 Ocho sentencias de muerte

Los Ealing Studios fueron una factoría inagotable de talento realizando algunas de las mejores comedias del cine británico de todos los tiempos.  Entre esas comedias se encuentra esta. Cuenta la historia de la venganza de un miembro de la familia D’Ascoyne por haber sido su madre y él mismo ninguneados y sacados de la familia al casarse ella con un italiano. Esta venganza tiene como objetivo terminar él mismo (Dennis Price) duque de D’Ascoyne, aunque tenga que acabar con toda la familia… toda la familia interpretada por Alec Guinness. Se nota que en Inglaterra no tenían ni idea de lo que era el código Hays porque el humor negro, la falta de escrúpulos y la infidelidad campan a sus anchas en una película divertidísima y con unas interpretaciones simplemente perfectas. Lo de Alec Ginness es directamente impresionante.

Regresión.

Soy muy fan de Alejandro Amenábar. Me parece un grandísimo director pero en este caso creo que es una película bastante menor. Cuenta la historia de una pequeña población en la que parece que un culto satánico está torturando y asesinando a gente. La película no está mal, se deja ver y tanto Ethan Hawke como David Thewliss y Emma Watson están bastante bien en sus papeles. Aún así, la historia es un thriller un poco cansino y con un giro original que, aunque está bien, no me impactó como supongo  que esperaba el director. Se deja ver pero se olvida a los cinco minutos.

Al servicio de las damas.

Corría el año 1936 y la gran depresión aún azotaba USA. En esa época el cine era uno de los entretenimientos más baratos que había y la gente acudía a él para entretenerse y olvidarse de la terrible situación en que se encontraban. Ha sido casualidad pero tres películas de la época he visto en estas semanas. Esta primera es una Obra Maestra de Gregory LaCava un director especialmente dotado para la screwball comedy. La película comienza con una Gymkana en la que  los niños ricos tienen que llevar a un vagabundo a la fiesta para ganar. El vagabundo en cuestión, Godfrey (William Powell, Ella, él y Asta) termina acompañando a Irene (Carole Lombard, Ser o no ser) una de esas niñas bien más ingenua y bienintencionada que creída y consentida como su hermana, finalmente decide que se quede en la casa como mayordomo. Huelga decir que nada será lo que parece y que hay secuencias realmente impagables. La película es magistral, muy divertida y con un enfoque  optimista.

Mi gran Noche

Primera de las dos aportaciones del cine español a esta selección que comparte guionista, el gran Jorge Guerricaechaverría con resultados muy dispares. En este caso, Mi Gran Noche es una enorme astracanada que comete el error de hacer burla de Telecinco y la celebración de la Noche Vieja y los que participan en ella por medio de la exageración. El problema es que Telecinco es tan patético y lamentable que la parodia apenas difiere de lo que se puede ver en cada día en la televisión. Si además te fríen con canciones como las de Raphael o Chayanne entre otros, no mejora el asunto. Lástima porque el reparto es de campanillas y el director es Álex de la Iglesia pero la película es ridícula y chabacana,  y, lo peor, sin gracia. Los personajes son eso, personajes, nunca te recuerdan a personas. Excepción hecha de Blanca Suárez que está estupenda, como casi siempre, le den el papel que le den.

Vampiresas 1933

Mervyn LeRoy dirige este musical en el que, en la Gran depresión, no hay dinero para espectáculos y aún así un famoso director se empeña en sacar uno precisamente tratando el tema de la Gran depresión.  La historia está muy bien, las actrices son estupendas, destacando Ruby Keeler, Ginger Rogers y Joan Blondell, y la música también con los espectaculares números musicales de Busby  Berkeley. Por supuesto se nota que aún no había código Hays en dos vías muy distintas. La primera es que las actrices van muy ligeras de ropa y la segunda que la crítica a la sociedad americana que abandona a sus soldados cuando vuelven a casa es demoledora, sobre todo en el número The Forgotten Man que además hace contraste con todo lo anterior, divertido y optimista. Realmente muy buena.

Kung-Fu Panda 3

Realmente no es la tercera parte de nada porque la película se puede ver sin haber visto las anteriores sin problema.  La animación es fantástica y la película es tan entretenida como anodina. Hay un malo que quiere quedarse con el Chi de todos los grandes maestros y Po se enfrentará a él. Se deja ver pero si no la ves tampoco pasa nada, hay mejores cosas.

Cien años de perdón.

Estupenda película de robos a bancos con mucha miga detrás. Actores de solvencia contrastada como Luis Tosar, Rodrigo de la Serna, Raúl Arévalo o José Coronado que mantienen con mucha clase un muy buen guión de Jorge Guerricaechevarría y que Daniel Calparsoro dirige con más maña que habitualmente.  Se deja ver muy bien, mantiene el suspense y es una buena película. Lo malo, no pude evitar acordarme de «El mundo es nuestro», que también va de un atraco a un banco con bastante más por debajo pero desde el punto humorístico y que es una auténtica maravilla.

Vive como quieras.

Por si alguien no lo sabe, Frank Capra es uno de los mejores directores de la historia. A este señor  se le daban realmente bien las historias divertidas y con buenas intenciones esquivando hábilmente la ñoñería que otros directores menos hábiles como Mimi Leder con Cadena de Favores o Lasse Hallstrom con Atando Cabos, por ejemplo, no consiguen evitar.

Lionel Barrymore, inconmensurable, es un hombre que vive con su muy excéntrica familia en su casa, es muy apreciado por toda la gente del barrio pero tiene el problema de que su casa es la única que queda por adquirir para que Edward Arnold, también magnífico, pueda tener el bloque completo de edificios de la zona, hundir a su rival y convertirse prácticamente en un monopolio.  A partir de aquí habrá el romance menos cursi del mundo entre James Stewart y Jean Arthur, una memorable cena y un igualmente memorable juicio, entre otras muchas secuencias perfectas. También habla de la gran depresión y de ricos y pobres con humor inteligencia y sensibilidad. Es una de esas películas que hay que ver antes de morir, que uno se merece sacar algo bueno de la vida y esta película lo es.

El hobbit. La batalla de los cinco ejércitos.

Es difícil decir que es una película, parece más el larguísimo capítulo final de una miniserie. Es lo que pasa cuando decides dedicar tres películas de más de tres horas para adaptar un libro de 249 páginas, que la historia se parte por cualquier parte y que luego cada película no está equilibrada. A esta le pasa lo que le pasaba a Harry Potter y las reliquias de la muerte parte 2, que es una gran batalla. Nada en contra de las grandes batallas, pero si no tienes el armazón argumental para las mismas, las motivaciones de los personajes, sus razones, sus sentimientos, su contexto, en definitiva, la película recuerda más a un espectáculo del parque de atracciones que a cine. Aparte, hay relleno a manta, personajes que no salían en la novela y romances para alargar el asunto, por no hablar de larguísimos, interminables, combates. En general los efectos son sensacionales, pero el abuso de los CGI hace que de vez en cuando sí que se note algún efecto menos cuidado que saca de la historia. Esta trilogía es tan mala como buena El señor de los anillos. Como era la última y había visto las anteriores la he visto, pero salvo por fanatismo con Tolkien yo no la vería. Es más, si eres fanático de Tolkien mejor que no la veas, tu salud lo agradecerá.

Cuentos de Terramar.

Ursula K. Leguin es una de las escritoras de ciencia ficción y fantasía más importantes y sus «Cuentos de Terramar» seguramente sea su obra más famosa. Goro Miyzaki adapta parte de la historia de LeGuin en una película con una animación bastante buena, aunque me parece peor que la habitual de Ghibli, unos fondos que parecen acuarelas y una historia con momentos bastante confusos pues la película no aclara acontecimientos que pasan y que se quedan en «porque sí».  Es buena película, tiene magos, dragones, duelos con espadas, está bastante bien, pero me ha parecido de las más flojas de Ghibli. De todas formas, a mí Ursula K. Leguin no me convence demasiado, así que puede que se junte todo.

Una selección bastante invadida por los clásicos, películas con cerca de ochenta años de antigüedad y que, sin embargo, al final han sido las que más me han gustado. No es raro que unos cuantos clásicos se vayan colando en esta sección de Cine en Píldoras.  Es muy difícil ver grandes clásicos en el cine. Es más, es difícil ver una película estrenada hace un es en el cine.  El caso es que desde mis tiempos en la filmoteca hacía mucho que no veía clásicos en pantalla grande y se agradece recuperar esa costumbre junto a los grandes blockbusters que son muy espectaculares pero que en este caso me han decepcionado bastante, como es el caso el Hobbit y Kung-Fu Panda.

Continuaremos viendo cine, a ver si hay buen cine actual.

Saludos fremen.

6 comentarios en «Cine en píldoras»

  1. No sabía lo de Terramar. Todavía no he leído a Leguin, pero es una autora que la tengo en vista.

    Y comparto lo del Hobbit. Yo no soy de los fans duros de Tolkien, e incluso tomo con gusto los añadidos bien hechos, pero no me esperaba que Jackson que cayera tan bajo. Quizás con un segundo visionado, pero lo dudo. Un salu2.

    1. Yo creo que un segundo visionado será aún peor porque ya sabes lo quue va a pasar y te vas a fijar en todo lo que le ha añadido para que diera para tres películas. Qué buena era la trilogía de El Señor de los anillos y qué mala esta de El Hobbit.

      En cuanto a Ursula K. Leguin, tiene una portentosa imaginación, pero a mí me resulta farragosa de leer. Sus novelas más famosas son las de los CUentos de Terramar, que no están mal, La mano izquierda de la oscuridad, que crea una civilización fascinante, pero que se me hizo pesado, y los desposeídos, que tal vez lea algún día.

      Saludos fremen.

  2. A mí Cuentos de Terramar me gustó, pero no tanto como otras películas del estudio. Ursula K. Leguin, que aceptó que se hiciera una película de Terramar por el estudio después de ver no recuerdo qué película de Mayazaki, dijo que era buena película, pero que esa no era su historia.

    1. Interesante y es normal, Ghibli se dedicaba a firmar obra maestra tras obra maestra, no se me ocurre mejor estudio al que dar los derechos. Lo que pasa es que le dieron el cambiazo y pusieron a dirigir la película a Goro Myazaki, que encima era su primera película. No es un mal comienzo, pero no resiste la comparación con otras del estudio.

    1. Lo cierto es que la segunda no la he visto, pero no lo eché en falta al ver la tercera. Se deja ver y la animación es muy espectacular, pero me pareció peor que la primera, primero porque una de las bazas de la primera es la sorpresa y esta no sorprende en nada, con una historia de luchar contra el malo vista mil veces y mucho mejor. Sin ir más lejos, esa misma historia se cuenta en «El niño y la bestia» y aprovecha para plantear bastantes cosas más incluyendo la evolución del niño, de la bestia, como cambian las cosas, en fin, que la historia es bastante simplona apoyada en el innegable carisma de Po pero sin una buena historia.

      Lo de Regresión, sí, es una pena pero se quedó en simple y sosa.

      Gracias por comentar y saludos fremen.

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