Retro-análisis: Castlevania III: Dracula’s Curse (NES)

Castlevania III: Dracula’s Curse es un juego desarrollado por Konami y publicado en Japón en 1989, siendo lanzado en Norteamérica un año más tarde.  Mientras que sería publicado en Europa en 1992 por Palcom Software. El juego corresponde a la última entrega de la saga para la Nintendo Entertainment System. El juego recupera la jugabilidad de la primera entrega, luego del cambio que sufrió la saga con Castlevania II. Simon’s Quest. Aunque añade elementos nuevos como poder controlar a distintos personajes y la posibilidad de elegir entre distintas rutas para completar el juego. Así nos volvemos a encontrar con un juego que se enmarca dentro del género de los plataformas con toques de acción.

La trama del juego toma el año 1476, donde el Conde Drácula ha devastado a Europa con su ejército de demonios. Debido a esto la Iglesia, decide llamar al Clan Belmont, una conocida familia de cazavampiros, quienes habían sido exiliados por la Iglesia por el inmenso poder que poseían, pero que debieron ser llamado por la gran amenaza que representaba Drácula. De este modo, Trevor Belmont es llamado a la acción, al ser el poseedor del legendario látigo Vampire KIller. Así deberá cruzar los campos de Transilvania en dirección al castillo de Drácula, donde se encontrará con posibles compañeros como la sacerdotisa Sypha Belnades, el pirata Grant DaNasty y Alucard el hijo de Drácula, quienes se unirán a la cruzada de Trevor por distintos motivos.

La jugabilidad es muy cercana a lo visto en la primera entrega de la saga, por lo que deberemos sortear niveles plagados de enemigos, plataformas que deben sortearse con saltos bien medidos y distintos peligros que pueden provocar nuestra muerte. Así tendremos la habilidad de atacar con nuestro látigo con el botón B, y de saltar con el botón A.  El movimiento de nuestro personaje se controla con la cruceta direccional, podremos desplazarnos hacia la izquierda o la derecha, además de agacharnos, pero la dirección de arriba sólo nos servirá para subir por escaleras.

El juego nos mostrara en todo momento nuestra barra de vida, así como la de los jefes enemigos en el momento en que luchemos contra ellos, también nos mostrara información como el tiempo que tenemos para completar la fase, nuestro puntaje que puede significarnos la obtención de las vidas que tengamos disponibles, así como el nivel en que nos encontremos y la sección del mismo. Finalmente veremos los corazones disponibles que poseamos, así como el compañero que podamos utilizar, una vez lo hayamos obtenido.

Contaremos con una diversidad de enemigos a lo largo de los escenarios, algunos clásicos como zombies, esqueletos, murciélagos y las cabezas de medusa que entorpecerán el avance de nuestra aventura. Mucho de estos enemigos aparecerán de manera infinita hasta que avancemos hacia la siguiente pantalla, las cuales generalmente se dividen por puertas. El juego mezcla muy bien plataformas complicadas, una gran cantidad de enemigos y peligros, para hacer de nuestro avance un ejercicio de concentración y reflejos.

El juego destaca también por sus jefes, que nos platean enfrentamientos donde deberemos maximizar nuestra capacidad para esquivar ataques, así como también nuestra capacidad para comprender los patrones de estos enemigos más poderosos. Aunque también deberemos ser veloces al momento de afrontar estos combates debido a que todas las fases poseen un límite de tiempo, que de no ser cumplido nos llevara a una muerte inmediata, mención especial a este tipo de situaciones en las fases más avanzadas (lo digo por experiencia propia).

A lo largo de la aventura podremos conseguir las clásicas armas secundarias que consumen corazones, estos últimos los podremos encontrar al derrotar a ciertos enemigos de manera aleatoria o al golpear antorchas, candelabros o ciertos objetos del escenario. Entre el set de armas del juego podemos encontrar el hacha, el agua bendita, el cuchillo y la cruz entre otras. Las cuales dotaran de nuevas estrategias de ataque a nuestro personaje, como tener un ataque efectivo contra enemigos aéreos o poder atacar desde una mayor distancia.

Como mencione anteriormente, durante nuestra aventura podremos conseguir a ciertos aliados para nuestra aventura, los compañeros con los que nos encontremos dependerán de las elecciones de ruta que realicemos. Hay que tener en cuenta que sólo podrá acompañarnos uno de ellos a la vez, y que al encontrarnos con dos de ellos se nos hará elegir entre uno de los dos. La primera que podremos encontrar será Sypha Belnades, una sacerdotisa que no es muy buena en el combate físico, pero posee unas poderosas magias que nos dotaran de buenos ataques a larga distancia. El segundo será el pirata Grant DaNasty, quien tiene la curiosa habilidad de sujetarse de las paredes y cambiar de dirección en el aire, lo que da cierta agilidad al momento de atacar con sus cuchillos. Finalmente, podremos encontrarnos con Alucard, quien tiene la habilidad de lanzar bolas de fuego a distancia, así como el convertirse en murciélago.

El juego cuenta con 15 escenarios distintos, componiéndose cada ruta de 9 escenarios en total, las rutas se diferencian por su nivel de dificultad, la ruta más sencilla consiste en ir directamente por la entrada frontal del castillo, mientras que la más difícil ocurre por una red de túneles y cavernas hasta llegar al Castillo de Drácula a través del acantilado debajo del mismo. Existe pequeñas variaciones dentro de estas rutas, que junto con el compañero que elijamos o la ausencia de estos provocara que consigamos distintos finales. De este modo, el juego cuenta con hasta cuatro finales distintos.

La dificultad del juego va bastante en la línea clásica, puesto que, es un juego difícil, no a alturas imposibles o desesperantes, pero si requiere de concentración, reflejos y habilidad para poder completarse. Esto contrasta con su duración que ronda entre la hora y la hora y media. Aunque una vez completos el juego iniciaremos con todo lo que hayamos conseguido (incluido compañero) desde el primer nivel.

Gráficamente nos encontramos frente a un título del último período de la NES, encontrándonos con sprites de buen tamaño y buena cantidad de animaciones. Así el juego corre de manera bastante fluida, incluso en los momentos donde aparecen varios enemigos en pantalla o se mezclan ataques de los mismos. Los tipos de enemigos son bastante variados encontrándonos con esqueletos, zombies, murciélagos, momias, armaduras, etc. Aunque es cierto que en determinadas instancias se repiten ciertos diseños con ligeras modificaciones o cambios en la paleta de color.

Donde el juego luce más impresionante tanto gráficamente como a nivel jugables, es durante los enfrentamientos contra los jefes finales, dado que nos encontraremos con diseños bastante únicos y de gran tamaño con un buen número de animaciones. El número de jefes es casi tan variado como la cantidad de niveles existentes, y todos presentan patrones de ataque que debemos aprender.

También contamos con una buena variedad de escenarios, como cavernas, pueblos, torres del reloj, castillos y bosques, que más allá de cambiar el ambiente y la estética del juego, tienen una implicancia jugable. Con esto me refiero a que los peligros del entorno y los enemigos tienen relación directa con los escenarios, así nos encontramos con plataformas mecánicas y péndulos en la torre del reloj o con corrientes marinas y plataformas que no resisten mucho tiempo nuestro peso durante las cavernas.

El apartado sonoro es uno de los puntos fuertes del juego, con temas que a día de hoy se siguen escuchando en una que otra entrega moderna de la franquicia. Esta es obra de Hidenori Maezawa (Salamander, Contra), Jun Funahashi (Batman Returns, Ganbare Goemon 3) y Yukie Morimoto (Gradius 2, Gradius 3). Nos encontramos con un conjunto de temas que ambientan muy bien los distintos momentos del juego, a base de melodías misteriosas, enérgicas, tenebrosas y melancólicas.

Con respecto a los efectos sonoros nos encontramos con lo clásico para aquellos tiempos, con sonidos estruendosos al romper objetos, sonidos para los golpes de nuestro látigo, las bolas de fuego y el característico sonido al desplazarnos por las escaleras. Todo ello muy bien realizado dentro de las limitaciones de su tiempo.

En mi opinión nos encontramos frente a un juego muy clásico en cuanto a su propuesta, siendo bastante continuista de la primera entrega de la franquicia, aunque agregando elementos como la elección de rutas y el uso de los compañeros dentro de su ecuación. Sigue siendo un juego que disfruta a día de hoy, aunque su dificultad puede presentar un problema para los que no estén acostumbrados a los juegos de esta época.

A pesar de esto resulta un juego bastante divertido, con niveles variados, enfrentamientos con jefes más exigentes y momentos muy interesantes. Además, gráficamente cumple bastante bien, y tiene una banda sonora bastante memorable. Por otra parte, su duración es más bien propia de un arcade (aunque va de la mano con la dificultad), así que puede ser un buen juego para probar durante una tarde libre.

Lo bueno:

Variado, exigente y rejugable

A nivel gráfico y sonoro es bastante bueno dentro de su hardware

Lo malo:

Duración algo escasa

Nota: 8

Bueno así termina otro análisis (ahora en la línea clásica) de la saga Castlevania. Curiosamente hace poco se ha anunciado la realización de una serie de la saga para Netflix, aunque aún no se ha aclarado el juego en el que se basara el argumento de la misma. Nos vemos en una próxima reseña!