DESTINY: LA VUELTA A MARTE EN 22 HORAS.

Análisis. Guía de compra para indecisos. Confirmación de tus peores temores. De todo un poco.

Gracias a una extraña alineación cósmica*, tuve la oportunidad de probar y “terminar” el nuevo juego de Bungie: Destiny; para quien les interese sepan que no lo compré, sino únicamente fue objeto de renta, pudiendo enterarse de los pormenores al final, pero por el momento  acompáñenme en este análisis:

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Este juego tiene una campaña para un solo jugador y también un apartado multijugador. Sin embargo para desconcierto y sorpresa de muchos, los chicos de Bungie han decidido que la Campaña sólo se puede jugar en línea, así que si no tienes conexión a internet y PS PLUS o X-BOX LIVE, no podrás jugar a Destiny.

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Para muchos, pues he leído este sentir en los foros de internet,  este juego debería ser gratis, dado que tanto en XBOX ONE y PS4 cobran por usar el servicio en línea. A tal respecto yo podría decirles que si ese fuera el caso, pueden jugar Warframe, DC On Line y cualquiera de los juegos free to play del PS4 –versión en que jugué Destiny–, sólo aclaro que este título no tiene microtransacciones, todo lo que tienes, te lo que te ganaste jugando; y si Bungie no cobrara por el juego, ellos no verían ni un centavo por concepto de ingresos. Recuerdo que dentro del juego estaba “corriendo con la lengua de fuera”, cuando un jugador me rebasó a toda velocidad en una moto gravitacional: de inmediato asumí que dichos vehículos estaban a la venta, pero pronto advertí que no era así, y que de hecho yo podía hacer uso de la misma: reitero, todo dentro del juego te lo ganas, te lo regalan o lo compras con dinero virtual, no hay malditas aberraciones free to play.

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También he leído que el juego es un Halo, que es un Borderlands, etc., pero si me preguntan el sabor que me dejó este título, es que se parece a… World of Warcraft –en First person shooter obviamente–, porque la forma de subir de nivel, comprar objetos, hacer misiones, el uso de objetos de prestigio, el cambio sucesivo y progresivo de tu apariencia exterior por el reemplazo de distintos elementos de la armadura, etc., me dio un aire absoluto al juego de Bilzzard: si señores Destiny es un multijugador masivo, de paga, pero no de renta mensual –al menos no por ellos–, y queda  claro que Bungie tiene planeado lanzar varias expansiones hasta hacerse rico en el proceso, a manera de los multijugadores masivos.

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No existe en Destiny ningún elemento que no se hubiera visto antes, ya sea en multijugador masivo o juegos de disparos; y en este sentido resulta triste que la compañía que innovó el juego envolvente de disparos para consolas con Halo, hubiera sido incapaz de aportar UN SOLO ELEMENTO nuevo en su juego. Si estás buscando frescura debes de mirar para otro lado, porque no encontrarás ninguna revolución conceptual aquí.

Queda claro que Bungie, en la versión para PS4, ha puesto todos los recursos en el apartado gráfico, como pueden observar en las capturas de pantalla que acompañan esta entrada, no existe en el mundo de los multijugadores masivos nada medianamente cercano a esto; se ha hecho un esfuerzo innegable por el fotorealismo –aunque todavía no alcanzado–: las nubes, el agua, la arena, las plantas, todo parece salido de Killzone: Shadowfall o Infamous: Second Son, que son juegos que sólo tienen que lidiar con un solo jugador; además los mapas –planetas— tras un molesto tiempo de carga disimulado por un video de tu nave volando –una y otra vez–, se cargan enteros; y cuando digo enteros hablamos de una zona de combate con superficie, subterráneos, grupos de enemigos que se regeneran cada cierto tiempo, que pelean entre ellos, pelean contigo y con los demás jugadores que arriben a dicho lugar; aunque sólo llegué a ver un máximo de diez jugadores, ignoro si por limitaciones del sistema o del servidor.

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Destiny se juega de la siguiente forma, existen diversos mapas que vienen a ser la Tierra, la luna, Venus y Marte. En cada planeta o satélite sólo hay una ubicación disponible: En la tierra tenemos un astrodomo ruso; en la Luna instalaciones alienígenas en un ambiente parecido al ártico; en Venus una ciudad abandonada devorada poco a poco por la selva; y Marte con un aire esencialmente desértico.

Cada planeta se va desbloqueando sucesivamente, y dentro de cada uno de ellos existe una serie de zonas que también se van desbloqueando en forma sucesiva conforme avanzas la historia y vas subiendo de nivel. Aunque estas zonas vienen a ser un solo mapa unido en forma continua y es posible recorrerlo de un tirón, en realidad debes esperar a avanzar en la historia para que se desbloqueen ciertos segmentos del nivel y eventos donde se encuentran los jefes finales. En práctica juegas de la siguiente forma: llegas a la zona de la misión UNO y la cumples; regresas a la Ciudad donde cobras tus recompensas, te reequipas con lo que compras o recogiste e inicias la misión DOS; sólo que para llegar a la zona de la misión DOS debes de volver a pasar de nueva cuenta por la zona de la primera, y volver a matar a los enemigos que antes liquidaste, y así sucesivamente: Para llegar a la zona de la misión SEIS, debes esencialmente pasar las ZONAS de las misiones UNO a la CINCO.

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Este sistema de juego obedece a que las muertes sucesivas de enemigos te permiten subir de nivel y enfrentar a los nuevos adversarios, que por zona también van subiendo de nivel. Aclaro que Bungie ha ejecutado un buen equilibrio de este sistema, dado que  nunca tienes la posibilidad de caminar ignorando los disparos, como por ejemplo Borderlands, donde llegado el momento hasta atropellabas a los enemigos de los niveles más bajos.

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Y pues bueno, cada muerte de enemigos y sobre todo cada misión cumplida, te dan experiencia, con la experiencia puedes subir de nivel, y acceder a habilidades diferentes y desde luego usar partes de armaduras y armas que antes no podías emplear. El árbol de habilidades es anecdótico porque no tienes de donde escoger como en otros juegos, aquí es sólo una «rama», y cuando subes de nivel, sólo tienes una nueva habilidad para escoger.

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Como lo dije, el aire del juego es de un multijugador: hay  una ciudad donde todos los jugadores asisten, y es posible ver a gente saltando, comprando, bailando, corriendo de un lado para otro y desaparecer al instante como en el típico multijugador masivo de toda la vida. Existen los mercaderes de objetos: armaduras, armas, emblemas, motos, naves, materiales de construcción; los instructores de cada una de los tipos de jugador, buzón, tablón de avisos para recompensas, bóveda, etc.; yo nunca pude acceder a la bóveda, ni fabricar nada, pero dado que el juego lo renté podría suponer que necesitas algún código para acceder a dicha función, o que tal habilidad se encuentra unida un nivel en específico, y yo sólo alcancé el nivel 18 antes de concluir la campaña.

La campaña se puede jugar completa en solitario, con excepción de los llamados calabozos –maldita terminología de multijugador masivo–, que son misiones con jefes muy resistentes, y que requieren necesariamente de tres jugadores, que pueden ser tus amigos o desconocidos que te asigna forzosamente la máquina. Puedes pasar muchas horas en solitario, ocasionalmente te topas con alguno o algunos jugadores, como en todo multijugador masivo pueden pasar de largo, ayudarte o unirse si ambos tienen la misma misión o acudir a algún “evento” que ocasionalmente se presenta y que permite sumarse a todos los jugadores cercanos. También de repente, siendo nivel 2, te encuentras con uno del nivel 20 que está pateando traseros en tu mapa, y sólo hasta después te das cuenta que está allí para cumplir determinada misión de recompensa o «farmeando», y no por las misiones de la historia ese nivel.

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Creo que es tarde para decirlo, pero Destiny es un First Person Shooter, que hace uso de habilidades especiales y tres armas –que se adquieren conforme avanzas en la historia–: una principal que puede ser un rifle de asalto o pistola, con munición en abundancia; una arma especial que puede ser escopeta o rifle de francotirador con munición escasa y capacidad limitada; y un arma pesada, que puede ser una ametralladora pesada o un lanzacohetes de capacidad más limitada y munición casi anecdótica. Las habilidades dependen de la clase que elijas, hay tres de ellas: Titán=soldado, Hechiceros=su nombre lo dice, y Cazadores=Sigilo, todos pueden usar todas las armas según entiendo, pero las habilidades son diferentes. Mi Titán desarrolló con el tiempo tres habilidades: lanzar una granada, un golpe de culata poderoso, y un golpe de piso estilo Hulk que elimina varios enemigos que estén en el radio de impacto. Estos poderes se recargan con el tiempo o las muertes de enemigos. La clase Hechiceros y Cazadores se las debo, porque sólo tuve tiempo –y ganas– de usar al Titán.

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El juego lo terminé –la campaña—en 22 horas y nivel 18; nunca me encontré con un jugador superior a nivel 22. Este tiempo es un buen promedio para un juego, aunque claro se está haciendo un poquito de trampa porque como lo señalé líneas arriba, para llegar a la misión CINCO de la Tierra, tuviste que pasar cinco veces el mapa de la misión UNO; cuatro veces el mapa de la misión DOS; tres veces el mapa de la misión TRES y dos veces de mapa de la misión CUATRO. Además resulta que si sigues estrictamente la historia, existen “eslabones perdidos”: la misión cuatro es para nivel 7, y la cinco para nivel 9, lo que significa que tienes que hacer misiones segundarias para subir ese nivel faltante y encarar de mejor forma la siguiente misión. También existen zonas donde no existe regeneración automática –en cualquier parte normal del juego revives y continúas con el mismo número de enemigos que dejaste–, y si mueres todos los enemigos se regeneran como al principio y no te reabastecen munición, lo que es un dolor de cabeza en las misiones calabozo, ya que si todos los jugadores mueren, el jefe regenera toda su salud, y créanme, son tipos que hay que estar disparando por media hora. En todo momento existe la reanimación por compañeros o extraños, sin ninguna penalización; en zonas normales si nadie te revive, apareces a los cuatro segundos; en los calabozos lo haces  después de casi medio minuto.

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El juego se puede jugar en dificultad normal y fácil. Si juegas sólo, te será un poco más difícil que si llegas con una flotilla de cinco amigos. De todas formas este juego se juega con las mismas argucias “jueguiles” del manual de siempre: huyendo hasta que el enemigo no te siga, porque regresa a su sector; disparándoles desde lejos porque no responden bien a este tipo de ataque; escondiéndote en la esquinita y disparar al jefe por una rendija. Los enemigos son incapaces de flanquearte, si te llegan por la espalda es porque allí los apareció la máquina; ellos esperarán pacientes en su sitio hasta que recuperes la salud por completo –la vida de regenera automáticamente en su totalidad, no hay botiquines–, para esperar a que les dispares. Es  decir el juego es una bestia gráfica con cerebro de… bestia, si quieres un ente pensante, mejor pasa jugar contra otros jugadores, porque la inteligencia artificial brilla por su ausencia, son simples montoneros.

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Por cuanto hace a la historia… si, como decía hay una historia, en todos los juegos hay una, o intento de la misma… pues bueno, déjenme pensar: ¡Ya lo tengo!: en Destiny hay un grupo de guerreros llamados los Guardianes ™ que son una chispa de luz en contra de la maldad del universo, ese mal que siempre amenaza con regresar y destruirlo todo: Y tú eres el elegido para detenerla; tienes un jefe llamado el “Speaker” –todo el juego está en inglés–, que se dedica a hablar en forma fatalista todo el tiempo, de la oscuridad que amenaza con consumir todo, y te manda a salvar el universo, sin ayudarte en nada, FIN. La historia ni siquiera tiene un comienzo que explique cómo se colonizó Marte o Venus, ni quien lo hizo, ni como lo hizo; tampoco de dónde salieron las razas del juego, ni que persiguen o quieren; en el juego aparecen algunos personajes que se dan gala de enigmáticos, y terminas el juego sin conocer sus motivaciones ni empatizar con ellos. Si quieres un juego con buena historia, o historia a secas, busca en otro sitio.

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El juego te permite en un inicio escoger clase, género y aspecto de tu personaje, que sólo vez en la ciudad, pues en combate utilizas siempre casco.

El único “sabor” a Halo lo tuve en dos momentos, cuando utilicé –por brevísimo tiempo—un vehículo flotante, que tenía el mismo manejo que los Ghost; y en general en ciertos toques de la casa: la combinación de enemigos de distintos tipos que te atacan en forma conjunta, y ciertos efectos visuales de disparo de armas como el Aguijón. Pero creo que han hecho un buen trabajo desmarcándose de su más famosa creación, que como les digo, me sabe más a World of  Warcraft que a Master Chief. La semejanza con Borderlands se podría ver reflejado en la existencia de cientos de armas, pero quien ha jugado WOW, sabe que allí también cada arma tiene su nombre y efectos especiales; además en Borderlands sólo se cambian las armas, el escudo y un modificador; en Destiny tu personaje va equipado con casco, armadura de brazo, pectoral, armadura de pierna, algunos consumibles, y demás adornos, lo que implica que cada nivel cambies de apariencia prácticamente, es decir más semejante a WOW que a la obra de Gearbox.

EN RESUMEN.- Destiny es un juego multijugador masivo de paga pero sin cuotas mensuales –si no tomas en cuentas el PS PLUS o el X-Box Live–, con un maravilloso apartado técnico, pero ninguna novedad que lo haga diferente –salvo las gráficas—al resto de los multijugadores de cuota y Free to Play; historia olvidable; inteligencia artificial mala a regular. En realidad la diversión la pone el jugador y sus amigos, como monojugador se saborea menos, y ese es el punto débil del juego: pocos tienen consolas nuevas, pocos tienen PS PLUS y menos aún tienen Destiny; serías muy afortunado si uno de tus amigos tiene esas tres cosas para jugar contigo, pero sería la excepción y no la regla, y esencialmente estás jugando todo el tiempo con compañeros que no conoces. Si Destiny hubiera salido en la pasada generación, donde prácticamente todo mundo tiene PS3 y XBOX 360, sería el hit de ventas, más por el juego, por  la emoción de disfrutar con todos tus amigos y pandilla. En estas condiciones Bungie tendrá que arar en el desierto –con expansiones que cobrará–, para mantener el interés en el juego durante al menos un año, para que el mercado de los dueños de consolas aumente. Definitivamente su tiempo de lanzamiento fue muy malo: o muy tarde o demasiado pronto.

¿Lo compro, lo juego o lo rento? Si no tienes PS4 ni X-BOX ONE, ni siquiera tienes que pensarlo mucho, no vale la pena comprarte la consola, el juego y el PLUS sólo para disfrutar Destiny, pues no es un juego vendeconsolas, la emoción que aporta el juego la puedes vivir fácilmente con Warframe u otro juego free to play.

Si tienes la consola, la decisión se torna más difícil: podría ser una compra recomendable si te gusta el género, tendrás un multijugador masivo de última generación bastante bonito y pulido, podrás invertir varias horas y años de tu vida en alcanzar clases y rangos; y poder utilizar un gatito en tu emblema no tiene precio. Como el juego no tiene cuotas, puedes jugar eternamente –insisto en que no tomo en cuenta el pago del servicio en línea, porque el mismo no sólo sirve para jugar Destiny–. Si esperas mucho, no te gustará encontrarte con tipos nivel 60 revolcándote sólo porque pasaron corriendo a tu lado; por otra parte, no creo que el juego baje de precio, no hasta que salgan las expansiones y bueno entonces te faltará ese contenido adicional.

Si piensas adquirir la consola puedes hacerte con la edición especial, además de incluir el juego, tienes un mes de PS PLUS gratis, lapso con el cual terminarás muy fácilmente la campaña y podrás echar unas buenas partidas multijugador. La decisión es tuya, como todo en la vida Destiny no es una porquería, ni tampoco el mesías que esta generación sin juegos esperaba; lo que hizo Bungie se encuentra bien hecho, aunque peca de falta de originalidad en todos los aspectos, parece que sólo siguieron una receta conocida y probada sin agregar ese extra que me hubiera hecho gritar como nena y decir: ¡Tienen que jugar Destiny! Saludos afectuosos.

ACTUALIZACION.- Me acaba de comentar un «Zonadeltero» que el juego si se puede jugar sin PS PLUS o X-BOX LIVE, sólo que no tienes interacción con otros jugadores, no te topas con nadie en la Ciudad de las compras y tampoco podrías acceder a las misiones tipo Calabozo. En esas condiciones la duración del juego podría bajar unas cuatro o cinco horas de duración, pero al menos se puede jugar, lo que ya es buena ganancia.

 * La alineación cósmica se obtuvo de la conjunción de una serie de eventos afortunados: un fin de semana “largo” –en México se celebra la independencia el 15-16 de Septiembre–; mi esposa está de viaje –la diferencia del polvo de cuatro días es indistinguible científicamente de la de seis–; cuando compré el PS4, también me hice del PS PLUS, sólo para que durante un año me regalaran jueguitos indies, de los cuáles sólo jugué y recomendaría uno: Don´t Starve; y para mi sorpresa me di cuenta que se vence en noviembre, y no pienso renovarlo, por lo que quería sacarle “un poco de jugo”  a la dichosa membresía; en mi área limítrofe existen pocos PS4, y menos gente que tenga el PLUS, y ninguno que quiera jugar Destiny: lo renté en el videoclub, y me tocó un disco nuevo, incluso sin la pegatina de Blockbuster. Con cinco días para jugarlo, el sábado pasado me reventé un maratón de doce horas, como cuando era joven, soltero e irresponsable, ¡Que tiempos aquellos!, he quedado un poco adolorido de la espalda y las manos, pero ha valido la pena.