Metal Gear Solid V: The Phantom Pain se acerca. A menos de una semana de su salida, he decidido ponerme con toda la saga y ultimar los juegos que me quedaban por completar al cien por cien. Así que sí, se vienen el cojón de entradas de MGS.
Ya entrando en el juego en cuestión, Peace Walker, he decidido que os lo resumiré de forma sencilla.
Peace Walker es un anime. Un anime con sus momentos, pero un anime al fin y al cabo.
Se le fue tantísimo la cabeza a Kojima en ciertos momentos que uno no entiende qué demonios le ocurre a la historia.
Os preguntaréis que porqué es un anime. No es porque haya doscientas waifus innecesarias que aportan nada a la trama. No es por el jodido objeto sexual que se vuelve Paz durante todo el juego. No es porque usen Vocaloid. Tampoco lo es esa batalla final donde todos están «¡Vamos Snake, te ayudaremos mandándote cosas! ¡El poder de la amistad vencerá!». Tampoco lo es la jodida canción que suena en esa batalla.
Sin comentarios.
El problema de todo ésto es que es un batiburrillo muy chungo, muy diluido de conceptos. Por un lado, la trama tiene aspectos característicos de la saga y en ciertos momentos brilla. De verdad.
Pero luego aparecen personajes que aportan cero a la trama, que hacen un total y completo ridículo, y escenas tan ilógicas que son de hacérselo mirar.
¡SPOILER!
Y mejor ni hablamos de que Kojima coge y dice «no, mira, que resulta que The Boss se equivocaba. Resulta que sí era una traidora». Anda y que te metan un Rail Gun por el culo.
¡SPOILER!
La trama es, siendo claros, irregular, y como decía arriba, un anime. TODO parece caer en clichés de un anime. Por Dios, que han cometido hasta el sacrilegio de poner Beyond the Bounds con Vocaloid como oficial.
Si creéis que ésto es surrealista, aún no habéis visto nada.
En el aspecto jugable, el juego coge ciertas cosas de Portable Ops, las adapta mejor a la portátil y añade cosas nuevas. Ahora ya tenemos un centro de mando, Mother Base, la cual podemos controlar y operar, y que nos será vital en todas nuestras operaciones.
El juego sigue un esquema de sigilo, pero ese es el esquema que sigue. Todas las mecánicas jugables, van en contra de él, empezando con el CQC y terminando con el armamento. No tengo nada en contra de que se apueste por un sistema de acción para una entrega portátil, pero por favor, que no se fuerce el esquema de sigilo si luego todo te premia a no usarlo.
¿Cómo? ¿Que crees que te puedes llevar un equipo de cuatro soldados a una misión? JAJAJAJAJAJA
La banda sonora está totalmente desaprovechada. Por momentos ni suena. Y hay canciones, muy buenas como Heaven’s Divide o Sing, que suena una o dos veces y ya está. Snake Eater estaba mil veces mejor aprovechada.
Lo peor de todo es que el jodido juego es divertido. Tiene tantas locuras que al final te acabas divirtiendo, y encima es multijugador. Algunas opciones, eso sí, me recuerdan a cosas que en Portable Ops estaban y que aquí no. Personalizar el nombre de los soldados, mayor implicación del jugador con el ejército, etc.
Son pequeños errores, pero al final se acaban quedando.
De los Jefes Finales mejor no hablamos.
/CONCLUSIONES: Peace Walker no es de los mejores títulos de la serie, es más, dista bastante de la calidad a la que nos tiene acostumbrados (ya que nunca ha habido una segunda y cuarta entrega). Pero eh, es una entrega de portátil, es entretenida, la historia es irregular pero cumple, y te ofrece muchas horas. No me acaba de convencer como sí lo hizo Portable Ops en su día, peeeero… No sé.
El Fulton, tíos. El Fulton es la vida.