El año pasado me enteré de que Natsume estaba preparando el regreso de uno de sus grandes clásicos a nueva generación. El original de SNES lo conocí a través de la emulación, ya que en nuestro territorio fue un juego escaso y tardío, por lo que nunca pudo aterrizar en mi consola, y tampoco lo recuerdo en la tienda de alquiler (seguramente ni sabía de su existencia). Sin embargo, con el tiempo, supe apreciar todo lo que este gran título era y es. Ahora ha regresado y en la mejor forma que cupiese esperar.