Ficha Técnica:
Dirección: Stephen Hopkins (No el de la silla..)
Producción: Joel Silver, Lawrence Gordon y John Davis
Guión: Jim y John Tomas
Música: Alan Silvestry
Fotografía: Peter Levy
Montaje: Mark Goldblatt y Ber Lovitt
Vestuario: Marylin Vance
Reparto: Danny glover, Bill Paxton, Gary Busey, Rubén blades, Maria conchita Alonso y Kevin Peter Hall
País de origen: E.E.U.U.
Año: 1991
Muy buenas compañeros gamefilianos. Hoy toca otra crítica fílmica en mi blog y, si me permitís, hoy voy a hablar de una de las secuelas más injustamente infravaloradas y desprestigiadas de cualquier saga en la historia del cine. Como muchos de vosotros sabréis, soy un gran fan de las películas de Alien y Depredador, mientras que no les encontremos juntos a ambos en una mísma película, todo irá bien… Puede que mi fanatísmo por ser un seguidor acerrimo a estas dos criaturas me ciegue un poco, pero también se reconocer cuando una película es mala y aburre y cuando una película es buena y entretiene de lo lindo. Pues el caso de esta película en cuestión es algo complicado. Es una película que sigue en la línea de la original presentándonos cambios e innovaciones a mejor mientras mantiene el espíritu y la esencia de la original pero, sobretodo, entretenida que sin embargo los críticos no la vieron así en la fecha de su estreno tachándola inmediatamente de estar desaprovechada, desentenderse de la original, aburrida y poco sorprendente. En otras palabras, la dieron de hostias hasta en el DNI.
Pero los críticos de cine «profesionales» no son precisamente dioses omniscientes que jamás se equivocan…ejem.. Blade Runner, ejem…¡tos más tonta, olle! Y con el paso del tiempo y nuestro pasotismo hacia los autodenominados «analistas del cine» podemos valorar una película como realmente se merece. Este es el caso de Depredador 2, una secuela totalmente digna de la saga con más acción que la primera y más acojone con el cazador espacial campando a sus anchas por la ciudad. ¿Queréis saber lo que opino de ella con exactitud? Pues leed esta exaustiva crítica y dejaros de Siskel, Roger Ebert y su puta madre…
Ambientada en una distópica Los Ángeles en 1997 (recordad que la peli es del año 91) la cinta nos presenta una ciudad sumida en el caos y completamente asolada por las guerras de bandas. Siendo una total zona de guerra en donde en cada calle hay un gran tiroteo contra la policía, en cada avenida se suceden las explosiones, los intercambios de plomo y la sangre es derramada a riachuelos… Las bandas tienen tal suministro de armas como para iniciar la tercera guerra mundial y la policía no da a basto para contenerlos. Convirtiéndose las calles en una total zona de conflicto, la ciudad estaba al borde de la declaración del estado de emergéncia y la imposición de la ley marcial para que el ejército tome cartas en el asunto y la arrase con todo lo que tenga era inminente. Por si fuera poco un Yautja (Un Depredador) ha venido a la ciudad para convertirla en su coto privado de caza. Dos han sido los factores que le han traido a la acojedora ciudad de las estrellas: El conflicto armado y el gran calor debido a que la ciudad también estaba pasándo una de las peores olas de calor veraniegas de su historia. Ahora un depredador campa por sus anchas en las calles de Los Ángeles masacrándo y cazando a todo quisqui sin que nadie se entere al creer que sus asesinatos son obra de ajustes de cuentas entre bandas. Pero uno de los mejores detectives del departamento de policía de los Ángeles, el teniente Mike Harrigan (Danny Glover) se empieza a dar cuenta de que esos extraños asesinatos no son obra de las bandas y junto con su equipo intentará lograr dar caza al asesino. Pero sin quererlo han despertado el interés del Depredador por ellos y el y su equipo se han convertido en su presa. Ahora Harrigan y sus compañeros deberán combatirle entre las calles de la ciudad para evitar ser masacrados y sobrevivir contra el más despiadado cazador de la galaxia.
En mi opinión el trasfondo que se le ha dado a la ciudad ha sido más que acertado para presentarnos al depredador. Una ciudad que se ha convertido en un campo de batalla y al borde del estado de sitio. Conflicto y calor son los factores predominantes que hacen que esta criatura se vaya de viaje a nuestro planeta. Aparte de que cambiar la jungla de la primera parte por la jungla urbana le da una mayor originalidad y resulta ser una de las mayores innovaciones que ha tenido la saga cumpliendo con muchos de los deseos de los fans (Ver al Depredador en su ciudad matando viandantes..), también nos demuestra que el bicharraco es un cazador todoterreno y se desenvuelve a las mil maravillas tanto entre matorrales como entre edifícios. El mayor criticísmo que se le ha dado a esta película ha sido la elección de los protagonistas. Lo queráis o no, cambiar al mastodonte de Arnold Schwarzenegger de la primera por Danny Glover (El segundón de Arma Letal) en la secuela pues desilusiona bastante. Es como si te sustituyeran en la cena una hamburguesa de tres pisos por una tortita: No te llena tanto… Pero al lo largo de la cinta veremos como Danny Glover resulta ser el solito un héroe de acción competente, un tío duro y con unos cojones tan grandes como Arnie capaz de hacerle frente perfectamente al depredador. Yo hubiera escogido otro protagonista pero no cabe duda de que Glover supo demostrar que era el más Gallito del corral y que le sobraban huevos para enfrentarse contra un asesino alienígena.
Cuando uno ve este plantel enorme de estrellas que brilla tanto, por su ausencia… Uno se piensa que está ante una producción de bajo presupuesto que no habrá tenido los fondos suficientes como para competir en espectacularidad con cualquier otra producción de HollyWood. Un gran equivocación puesto que esta mísma es una gran producción de la industria como cualquier otra película de acción blockbuster y palomitera de época vacacional. Esto nos lo demuestra desde el primer minuto de metraje en el que ya vemos las balas silbando, las armas disparando y tropecientas explosiones alrededor de las calles. Os lo digo en serio, no pasan más de treinta segundos desde que véis el título de la película para ver una batalla campal en todas las calles con un despliegue de medios impresionante. Explosiones, coches derrapando, un ejército de policias y otro de pandilleros intercambiando plomo, barricadas, piquetes, humo, fuego, casquillos, agujeros de bala… Uno de los mejores comienzos e introducciones que se le puede dar a una película.. Si ya empieza una película con una batalla campal, empezamos muy bien…
Pero claro, al darme cuenta de que el mísmo director de la primera parte, Joel Silver, el responsable y creador de los mejores efectos especiales de películas de acción tales como: «La Jungla de Cristal«, «Arma Letal«, «El último boy Scout» o «Matrix» estaba a cargo de la producción de esta película, uno ya se imaginaba el por qué de la gran calidad de las escenas de acción. Teníamos a uno de los mejores directores de pelis de accíon a cargo de la producción. Así que los amantes de las explosiones, demoliciones, tiroteos, llamaradas y demás sinónimos de la destrucción en la gran pantalla podían estar tranquilos que tendrían su buena ración. Los amantes de la pólvora podáimos regocijarnos bien a gusto con la película. También los efectos del Depredador tales como su estela de su dispositivo de camuflaje o su visión inflarroja repiten en esta película para ofrecernos la mísma calidad visual de la primera. Así que los que piensan que esta película está por debajo de la primera en cuanto a efectos visuales ya se están callando.:
De la banda sonora repite otro maestro que estuvo en la producción de la primera: Alan Silvestry, el creador de la fantástica banda sonora de la primera película y de vários de los temas más reconocidos del cine vuelve a estar a cargo de las partituras de la secuela. Otra vez volveremos a escuchar esos temas inconfundibles que tanto aumentaban la tensión de la primera entrega. Vuelve otra vez a componer para ponernos de los nervios al mísmo tiempo que crea temas nuevso muy acordes con la ambientación de la película. Pero de lo que más se hace disfrutar es de que vuelvan a oirse esos temás clásicos en nuestros oidos. El tío sabe crear atmosferas músicales con composiciones orquestradas que casan perfectamente con la situación que discurre en cada momento de la película. Un verdadero maestro. Os dejo con algunas de sus mejores muestras:
Desde siempre se han hecho comparaciones entre primeras partes y sus secuelas. En terminos de calidad, de diversión, argumento… y sobretodo en este tipo de películas en términos de terror, acojonamiento o sorpresa. En este caso siempre se ha querido comparar el factor sorpresa que nos otorgaba la original con el de la secuela. Si el bicho consigue acojonar tanto en la ciudad como cuando los vimos por primera vez en la jungla. Aunque en esta parte ese factor sospresa se ha perdido, (sabemos que no se va quedar en la ciudad a vender galletitas…) no quiere decir que la película en si sea peor. En esta cinta digamos que ocurre exactamente lo mísmo que en la mayoría de las secuelas que se han hecho tanto en el cine como en el mundo de los videojuegos: Ya que la terrorífica sorpresa que nos ha brindado la primera película se ha quedado en ella, los productores aprovehan para darnos en su secuela un planteamiento más enfocado hacia la acción. Ocurrió con Aliens: El Regreso, ocurrió con Resident Evil 4 y ambas son producciones de un altísima calidad. Aquí sucede lo mísmo, la cinta está más orientada a hacernos disfrutar con la acción más desenfrenada pero no deja de lado lo que hizo grande a la primera, el terror más visceral que nos provocaba la criatura. ¿Y como consigue esta delicada fusión? Pues mostrándonos lo que realmente nos hacía cagarnos la pata abajo en la primera:
El Gore, la sangre y la violencia más espantosa. Todo estos grotescos factores vuelven a hacer acto de presencia en esta película incluso en mayor medida que en la primera diria yo. Volveremos a ver como el Depredador le arranca la columna vertebral y el cráneo de cuajo a un cadaver, seremos testigos de como el Depredador cercena una cabeza humana como si fuera mantequilla, como empala a un pandillero con su lanza como un pinchito moruno, O la infame escena del metro en la que masacra todo un tren lleno de pasajeros el solito… Aunque sea una película orientada a la acción puede ser tan terrorífica como la primera debido a su alto contenido violento y escenas sangrientas que tanto me gustan pero que pueden poner enfermo a los más sensibles.
Eso si, como película de acción no tiene precio. Desde el primer minuto de metraje tendremos tiroteos, explosiones, persecucciones… adrenalina pura y dura pero, eso si, con algunos descansos que le dan tintes detectivescos y de cine policiaco para profundizar más en la historia y ver como el equipo de Harrigan investiga los misteriosos asesinatos que finalmente desembocan en el cazador espacial. Tiene mucha acción si, pero con un ritmo escalonado, yendo poco a poco. No es ir de tiroteo en tiroteo hasta que tengámos sobredósis de metralla en sangre. La película empieza con una gran batalla campal si, pero el ritmo va bajando en favor a la investigación y el horrible destino que sufren los miembros del equipo de Harrigan acentuando más el componente de terror de la película. Yo diría que ocurre lo mísmo que con la primera parte: Primero empieza como la típica película de acción con un par de escenas llenas de tiroteos y efectos especiales de calidad para luego terminar siendo una película de terror en donde los protagonístas van cayendo uno a uno a manos del bicharraco asesino.
El planteamiento es exactamente el mísmo que en la original pero con un ligero cambio en la ambientación. Esto no quiere decir que sea malo, si la fórmula funcionó una vez, pues funcionará la segunda. ¿Y cual fue el resultado en esta ocasión? Pues una mezcla entre cinta de acción y terror entretenida de principio a fin y acojonante en muchos momentos. Una mezcla que funciona muy bien que, sin llegar a ser tan buena como la primera, es digna de ser un buena secuela de la saga. Una buena película de acción palomitera que puede haceros pasar vuestros mejores ratos o los peores. Depende de en que escena estéis…
En fin, una buena película de acción y terror que no se merecía para nada las malas críticas que se llevó en su día y toda una secuela digna de pertenecer a la saga Depredador. Esta cinta gustará tanto a los fans, de la saga, como a los que no, gustará tanto a los seguidores del cine de acción más palomitero y sin complicaciones como a los que buscan una buena peli de terror. En ambos casos cumplirá de sobra con su cometido: Haceros pasar un buen rato. Al menos no es el truñazo que sacó Robert Rodriguez el año pasado…