Decepciones en serie: Better Call Saul Temporada 2

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No suele ser mi estilo el criticar negativamente una serie en mi blog. Siempre suelo hablar de aquellas que me han fascinado y las que por su calidad piden a gritos mi recomendación. Pero para todo hay una primera vez. Especialmente cuando tienes una serie cuya primera temporada no solo era prometedora sino magnifica por méritos propios, y luego viene una segunda temporada que aparte de no estar a la altura de las expectativas, encima resulta ser todo un aburrimiento. Las decepciones suelen ser más profundas que las cagadas aisladas. Cuanto más alto dejas pedestal, más profunda será la caída. Pues eso es justo lo que me ha ocurrido con la 2ª Temporada de Better Call Saul. Una decepción tan tremenda que me estoy replanteando seriamente el continuar con el Spin Off de la famosa serie de Gilligan. Si queréis saber el porqué de mi decepción, seguid leyendo:

 

 

 

Aburrida, intranscendente y sin direccionalidad. Esas son las palabras que mejor definen esta 2ª Temporada. Una temporada tediosa que se resume en un constante tira y afloja en donde justo cuando crees que va a pasar algo, no pasa absolutamente nada. Y cuando realmente ocurre algo, ocurre algún otro acontecimiento que devuelve las cosas tal y como están. Es el statu quo del aburrimiento y la intrascendencia. Una 2ª Temporada que lleva escrito con todas las letras y en mayúsculas DE RELLENO y que redefine tanto ese concepto que hace parecer la 2º temporada de The Walking Dead la historia más grande jamás contada. Asi de claro os lo dejo.

En esta temporada todo parece quedar predispuesto para que cuanto más cambien las cosas, más sigan igual. Y que todo lo que parecía dar pie a una evolución de la historia o de los personajes, se quede en un montón de nada y en una gran pérdida de tiempo para el espectador. Y esto me jode especialmente si tenemos en cuenta el final de la primera temporada. Donde nuestro protagonista dejada de ser James McGuill para abrazar completamente a Saul. El momento en el que se convertiría en el maestro embaucador y genial caradura que baila a ambos lados de la ley con el que nos enamoramos en Breaking Bad. Pues aquí nada de eso. La serie decide reiniciar desde cero, devolvernos al James McGuill aburrido y legítimo de siempre, y  al mismo tiempo matar toda la diversión que su fascinante personaje nos otorgaba.

 

 

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Es un constante tira y afloja, tan simple como eso. Cuantas más oportunidades tenemos de ver a Jimmy convertirse en Saul y realizar su magia con sus tejemanejes y subterfugios criminales, la serie le da otra oportunidad por enésima vez de volverse legal. Dicho en otras palabras: En cuanto la serie contempla el volverse entretenida por momentos, se le da otra oportunidad de volverse otro puto y aburrido drama legal insípido e intrascendente. Y no tengo nada en contra de los dramas legales. Pero cuando tenemos ciento y la madre de series dedicadas a ello como The Good Wife, The Guardian, Boston Legal, Shark, The Practice, y encima tratan de convertirme en eso a una serie caracterizada por su brutal thriller criminal y evolución de los personajes, como me hincha los cojones sobremanera. Algo que puedo entender es que la serie quiera reflejar la eterna lucha de Jimmy entre ser un tipo Legal o volverse completamente Saul Goodman. Pero otra bien distinta es eso convertir eso en un eterno tedio que no llega a ninguna parte y acabe por mermar la paciencia del espectador.

Y toda esta forma de matar el buen ritmo de la serie y transformarla en una “Albuquerque Legal” de pacotilla se la debemos a un solo personaje: Kim Wexler. El plot point dedicado entera y exclusivamente a cortarle las alas a Jimmy para alargar artificialmente la trama. Kim es una triste excusa de personaje que sirve como recurso cutre de guión flojo para devolver la trama y a Jimmy a su statu quo legal en donde todo vuelve a la normalidad y nunca pasa nada. Pero claro, solo cuando a Kim le conviene. Pues esto es lo más enfuerecedor de su personaje. En ciertos momentos Kim parece coquetear con el lado oscuro de Jimmy y parece gustarle su Saul Goodman interior, pero solo cuando no tiene nada que perder y cuando parece que su vida profesional se ha quedado estancada. Pero en cuanto tiene una oportunidad importante de escalar en el bufete, de repente se vuelve moralista, se desentiende de Jimmy o le hace la vida imposible para forzarle a volverse legal. Una falsa santurrona que manipula al pobre Jimmy cuando la conviene

 

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Es oficial, Kim se ha convertido en la “Bloquea-Pollas” de la serie. Y no me refiero a lo que respecta a su personaje, porque si es así, no es un error de la serie, es una caracterización pensada y realizada así para dicho personaje. Quejarse de eso sería como quejarse de Skyler por ser así en Breaking Bad. Todos la odiábamos pero estaba pensado así, para ser odiada.  Y tenía su peso, sentido y trascendencia para la trama. Pero aquí es bien distinto, cuando me refiero que Kim es una Bloquea-Pollas no me refiero a Jimmy, me refiero a que lo es para el ritmo de la serie en general. Kim es una pésima excusa para devolver a la trama a su cero absoluto y reiniciar por completo su diversión. La verdad es que conociendo el talento de Gilligan, el tío podría haber optado por otra forma de devolver la calma al ritmo de la serie que no se redujera a un mero personaje que utiliza y pagafantea al protagonista.

De lo poco que agradezco de la serie como siempre son los capítulos dedicados a Mike Ehrmantraut. Vuelven a ser una lección brutal de cómo hacer un drama criminal y policíaco cojonudo al mismo tiempo que le dan más trasfondo y profundizan aún más en el personaje de Mike. Catapultándolo al cenit del alucine y de los personaje más duros que ha dado la ficción moderna. El ver como poco a poco se va transformando en el “Sr. Lobo” de Albuquerque poniendo en jaque a todas las bandas de la ciudad valiéndose solo de sus santos cojones es una gozada. Bravo de nuevo por esos capitulazos, porque sin duda han sido lo único que me ha mantenido el interés durante esta pésima temporada.

 

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Otro puntazo sin duda es el personaje de Chuck McGill. Un magnifico antagonista que hace lo mejor que puede hacer en esta clase de series. Evolucionar. O en este caso, mudar de piel y mostrar su verdadero rostro como un verdadero psicópata. Revelarse no como el buen hermano de Jimmy que agradece que le cuiden, sino como el cabrón desalmado que guarda una relación instrumental y parasitaria en la que solo necesita a Jimmy para cuidar su enfermedad, para luego putearle y perjudicarle desde las sombras. Este personaje cada vez me fascina más, puesto que es un psicópata que no guarda ni compasión ni empatía ni siquiera por su propio hermano y tan solo le necesita por mera conveniencia. Personajes como  Ehrmantraut Y Chuck evidencian el magnífico guion que demuestra tener esta serie en algunos momentos, por eso me duele más el ver en que se ha convertido el resto de los capítulos. Porque teniendo todos los ingredientes para convertirse en un primer plato, se ha convertido en simple relleno para pavos.

Porque el resto se reduce a simplemente a eso: Relleno. Formas zafias de rellenar capítulos con aburridas tramas legales o con situaciones que parecen dar pie a tramas más trascendentes pero que al final no llegan a ninguna parte. Es como si hubieran reducido la trama a la de una sitcom mierdosa noventera, en donde pase lo que pase, todo acaba de vuelta a la normalidad al final de cada episodio. Y no hay algo más tocacojones para mí que ver eso en una serie de estas características. El ver como una serie que se ha caracterizado por la evolución de la trama y los personajes, acabe estancándose sin evolucionar nada.

10 Capítulos en donde para que ocurre mucho, pero no ocurre nada. 10 Capítulos en donde se nos prometió el cambio de James McGill a Saul Goodman y donde acabó quedándose tal y como estada. 10 capítulos de puro aburrimiento e intrascendencia. Quizá solo se salven un par si contamos los de Ehrmantraut, pero ninguno más. Y me entristece ver una serie de los creadores de Breaking Bad pueda llegar a este nivel de insipidez. Esperemos que Gilligan y compañía se pongan las pilas porque esta segunda temporada ha sido lo más decepcionante que he visto desde la 2ª de The Walking Dead. Joder, será la 2ª Temporada de las series deben estar gafadas o algo…

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