Primero están los juegos de James Bond que marcan historia, como Goldeneye 007. Luego están los juegos excelentes de James Bond que tienden a aproximarse o imitar su fórmula, como NightFire. Y luego están los juegos de Bond simplemente buenos, que no llegaron a tener la atención que se merecían por el sencillo hecho de no ser como los antes mencionados.
Este es el caso de 007: Todo o Nada. Un buen juego que pasó bajo el radar de muchos jugones por las razones antes mencionadas. Yo mismo pasé de él al pensar que me encontraría con un juego mediocre que mancillaría la licencia. Y de no ser por las insistentes recomendaciones de un colega, acabaría siendo otro juego más condenado a lo más profundo del olvido. Bueno, nunca es tarde para rectificar. Y menos si te encuentras sorpresas como este juegazo.
ASI NO SE ME HACE UN TPS DE BOND EA, ASI NO…
Antes de nada, un poco de contexto. Todo aquel que haya crecido con los juegos de James Bond y haya devorado todos y cada uno de los juegos basados en el personaje, sabe de sobra que desde aquella obra maestra de Rareware, lo que mejor le sienta al agente secreto es el género de los First Person Shooters. Ya se intentaron funestos experimentos con la licencia llevandola a otros géneros como el Third Person Shooter o la conducción con desastrosos resultados como El Mañana Nunca Muere o 007: Racing
Por lo que, tras ver que 007: Todo o Nada combina elementos de Third Person Shooter con fases de conducción, no era de extrañar que la primera y más natural reacción de todo fan sea de un asco/repelús acojonante, alejándose del juego como si estuviera poseído por una maldición a ritmo de Vade Retro! Perfectamente compresible después de tragarse esas 2 pedazo de atrocidades cortesía de EA…
ASÍ SI, EA, ASÍ SI.
Pero, sorprendentemente, este es un buen juego. Y no solo eso, sino que fue el primer juego de la franquicia en demostrar que se puede cambiar el enfoque jugable sin matarla en el intento. Aunque ni siquiera esta afirmación se la acerca. Ya que el título ostenta grandes valores de producción y calidad en todos su ámbitos, más allá de lo enteramente jugable. Historia, presentación, contenido, rejugabilidad…
Comenzando por la historia, tuve otra sorpresa aún mayor. Sabía que era una historia enteramente original, escrita expresamente para el juego, pero pensaba que con NightFire los de EA habían tocado techo en lo que narrativas originales se refiere. Pero también me equivocaba. Ya que este atesora una de las historias que, a mi juicio, parecen encajar mejor con el mundo del agente secreto. Tanto que interacciona mucho con las líneas argumentales que las películas y novelas nos han dejado.
WILLEN DAFOE VUELVE DEL BEYOND TWO SOULS CON GANAS DE DOMINAR EL MUNDO, Y MUCHA MALA HOSTIA…
El argumento trata sobre el típico empresario poderoso que amenaza con dominar el mundo con una tecnología que pondría los gobiernos del mundo bajo sus pies. Hasta ahí nada nuevo. Podría pasar como la típica y tópica historia del malvado villano que quiere dominar el mundo que ya hemos visto cientos de miles de veces en la filmografía del agente secreto. Pero ¿Y si os dijera que el malo resulta ser ni más ni menos que el puto discípulo de Max Zorin? (El malo de Panorama para Matar, para quien no lo sepa…) Ya la trama se complica un poquillo, ¿Eh?
Pues así es. El malo resulta ser un ex agente del KGB resentido con su gobierno, con el MI6 y especialmente con Bond (Coño, a fin de cuentas, se cargó a su mentor…) que busca vengarse conquistando el mundo con su ejército armado con nanotecnología. Y si encima os digo que el malo lo interpreta nada menos que el puto Willhem Dafoe, pues ya gana puntos extra en peligrosidad y acojone… Y todo esto para lo que a priori es una historia no oficial de la franquicia. Pues oye, no está nada mal…
GEARS OF BOND
Y pasando ya a lo que verdaderamente importa, vamos con su jugabilidad. Como ya dije, la mecánica se ha cambiado a la de un Thrid Person Shooter al uso. Pero esto es tan solo la base, la punta del iceberg para una mecánica de juego tan variada como entretenida. Para empezar tenemos unas mecánicas de apuntado y un sistema coberturas bastante bien implementados. Tanto que se nos hará de lo más natural cubrirse y disparar a los enemigos en un par de minutos. Y todo esto muchos años antes de que la modita de los shooters con coberturas empezara a dominar todo el mercado. Es interesante ver como juegos de generaciones pasadas revientan en calidad, mecánicas que ahora nos hartamos de ver.
Pero ojo, no son mecánicas perfectas y les falta algo de pulimento. Pues algunas veces el sistema de apuntado automático no funcionará tan bien como se esperaba y, aunque tengamos a un enemigo enfrente de nosotros, este decidirá por sus santos cojones no apuntarlo y estaremos vendidos en más de una ocasión. Por no decir que el sistema de coberturas funciona, si da el caso de que a Bond le parece bien cubrirse en tal pared. Porque hay algunas veces en las que, por mucho que machaques el botón R2, el tío no querrá cubrirse en ella. Debe ser que tiene la espalda delicada…
A LOS AGENTES SECRETOS NO LES AFECTA LA GRAVEDAD
Pero son mecánicas que, cuando funcionan, los tiroteos resultan de lo más naturales y frenéticos. Además no resulta muy difícil comprender y compensar estas carencias una vez te acostumbras al juego. Pero incluso disparar solo es otra de las múltiples opciones que nos ofrecen para completar los niveles. Ya que tenemos hasta un complejo sistema de golpes y llaves cuerpo a cuerpo, en el que podremos ejecutar hasta combos complejos como si de un Beat ‘Em Up se tratase. Llegando a pasarnos las pantallas enteras a hostia limpia.E incluso en determinados niveles nos darán la oportunidad de completarlos sigilosamente con eliminaciones cuerpo a cuerpo y pistola con silenciador. Pero lamentablemente estas solo serán un par de ocasiones aisladas en pro de un ritmo de juego mucho más bombástico y frenético que en anteriores títulos de la franquicia. Y eso es decirlo de una manera eufemística, porque en este juego James Bond parece más John Rambo con esmoquin que otra cosa.
En serio os lo digo, el carácter de este juego es tan exageradamente bestia que parece que los de EA hicieron una especie de Army of Two/Call of Duty o algo por estilo y luego le pusieron la licencia de James Bond. Porque en este juego la parte más sutil y delicada que vas a tener será la de ver como el agente se carga un Harrier con un lanzacohetes para luego tirarse en rapel disparando por un edificio en llamas. Y mejor no os hablo de la parte menos sutil… Pero lo que está claro es que si uno quiere las escenas de acción más bestias y sobrexageradas para un Third Person shooter, tiene mucho que disfrutar aquí…
UNA CARRERA DE RALLIES EN UN JUEGO DE JAMES BOND. ¿POR QUÉ? ¿Y POR QUE NO?
Y para redondear, siempre tendremos una fase de conducción. Y fases para aburrir. Del palo que, por cada una a pie, tendremos otra de conducción. Fases que van Desde pilotar el ya clásico Aston Martin Vanquish liándola parda por la ciudad con sus ametralladores y misiles incorporados, pasando por pilotar hasta putas motos, tanques y helicópteros. Una sucesión de situaciones estrambóticas y tan ridículamente exageradas que tienen su culmen en una carrera de Rally. Y es que en cierto momento del juego hasta nos obligarán a echar una puta carrera de Rally bajo la excusa chorra de que el ganador se citará con el malo en su finca privada.
En otras palabras, fases a pie que parecen el puto final de un Call of Duty y fases de conducción que incluyen carreras, persecuciones con motos, y completa destrucción con helicópteros y tanques ¿Y Por Qué? Pues porque a EA le salió de sus santos cojones! ¿Y sabéis una cosa? MOLA. Es jodidamente demencial a la par que alucinante el ver como la campaña se convierte en una puta montaña rusa sin descanso. Ian Fleming se estará revolviendo en su tumba. Pero ver como Bond se tira al vacío de una montaña para rescatar a la chica es ridículamente genial…
UN ESMOQUIN Y UNA SPAS 12. YA ESTOY LISTO PARA NOCHE VIEJA
Y no contentos con una campaña de infarto, los de EA decidieron rematar la faena no solo añadiéndole el clásico, a la par que obligado, modo multijugador a 4, sino que también añadieron una campaña cooperativa de 2 jugadores en las que podías ponerte a tirotear legiones de matones junto con un colega en fases a pie, o echar una carrera contra el en fases de conducción. Todo esto al final hace que tengamos ante nosotros un producto jugable muy completito y variado al que le echaremos su buena cantidad de horas. Por no decir endiabladamente rejugable, pues durante estas 2 últimas semanas me he viciado a él lo que no está escrito. Todo por picarme a ver si sacaba las medallas de oro y platino en todos los niveles para así obtener cantidades de desbloqueables como personajes, mapas y trucos.
Pero hay una cuestión aún pendiente ¿Cómo coño es posible tanta calidad en un juego de EA? Yo os lo diré: EA RedWood Shores. Puede que este nombre no os diga mucho, pero ¿Y si ahora os digo que era el nombre de la antigua Visceral Games? Pues así es. Una de las mejores compañías de estos años con joyazas a sus espaldas como los Dead Space y el Army of Two Devil’s Cartel fue la responsable de la creación de esta joyaza. Con eso creo que os he disipado toda duda.
LOS ASCENSORES SON PARA NENAZAS!
Como conclusión, un magnifico juego que fue toda una sorpresa y no debí dejar pasar en su día. Con una campaña de infarto, enorme variedad de niveles y situaciones de juego, modo cooperativo y una tremenda rejugabilidad, definitivamente han sido los 3 pavos mejor invertidos de mi vida en una tienda de 2ª Mano. Así que, la próxima vez que paséis de un juego por sus apariencias, dale una 2ª oportunidad. Nunca se sabe, puede que haya sido creado por una de las mejores desarrolladoras del momento…
Bueno, esto es todo por hoy. Espero que hayáis disfrutado con la reseña. Un Saludo a todos.