Hoy me gustaría hablaros del que, en mi opinión, ha sido uno de los juegos más injustamente infravalorados de la pasada generación. El único título de ID software que fue un rotundo fracaso en ventas. Pero uno de los shooters más variados y entretenidos que ha sacado la compañía en los últimos años. Mucho y muy mal se habló de él en su momento, muchos fueron los jugones que se llevaron una gran decepción con él. Pero muy pocos consiguieron disfrutarlo y valorarlo como realmente se merecía. Así que, creo que no hay mejor lugar que esta sección para concederle una segunda oportunidad al que considero el sleeper más sonado de la pasada generación.
YERMO POSTAPOCALIPTICO, HACER RECADITOS A TODO EL MUNDO, SER EL CORREVEIDILE SUPREMO…
NO SE, CREO RECORDAR HABER HECHO ESTO COMO UNAS 700 VECES MÁS EN OTROS JUEGOS, ¿NO?…
Antes de nada, puedo comprender las razones por las cuales este shooter pasó muy por debajo del radar. Era claramente una víctima de su tiempo. Salió peligrosamente demasiado cerca de juegos que abordaban la misma temática como Borderlands o Fallout New Vegas, aparte de que estos atesoraban bastante más contenido que el juego de ID software. Y ya la gente como que estaba un poco hasta los huevos de tanto shooter de ambientación postapocaliptica. Si a eso le añadimos un ligero toque cell-Shading que recuerda en demasía a Borderlands (Aunque muchísimo más vistoso y cuidado que este último) pues la gente no pudo evitar las más que odiosas comparaciones.
Y si encima a todo esto lo rematamos con un final decepcionante que no explica absolutamente nada y una duración que, siendo bastante generosa, resultó mucho menor de la que se esperaba para un juego de estas características, condimentado con un Hype estratosférico, pues ya tienes el caldo de cultivo para la decepción del año. Pero ahora bien, si conseguís desenchufar la parte más remilgada y puntillosa de vuestro cerebro, obtendréis con este juego uno de los viajes más divertidos que recordaréis en mucho tiempo.
Metiéndonos ya con el juego en cuestión, como dije antes, su ambientación nos enmarca en un futuro postapocaliptico donde en esta ocasión, el planeta Tierra y la humanidad han sido devastadas por la colisión de un asteroide en el año 2029. Pero una pequeña parte de la humanidad consiguió salvarse en arcas lanzadas a la órbita del planeta con unos pocos privilegiados criogenizados en ellas. El juego nos pone en el pellejo de uno de estos supervivientes recién salido de la cámara en mitad de un Yermo desértico dominado por mutantes, bandidos y peligrosas bandas armadas en donde tendremos que buscarnos la vida para sobrevivir.
AK-47. FIABLE COMPAÑERO ENTRE APOCALIPSIS Y CATÁSTROFES DESDE 1947
A nivel jugable se trata de otro shooter de mundo abierto con elementos de RPG y gestión de recursos e inventario donde tendremos que arreglárnoslas para sobrevivir. Vamos que, a nivel jugable y de ambientación no ofrece nada nuevo bajo el sol. Nada que no hayamos hecho ya incontables veces en juegos como Stalker: SoC o Fallout. Pero es la forma en la que trata estos elementos jugables e incorpora muchos nuevos, lo que acaba presentándonos un juego con mucha originalidad y personalidad propia.
Comenzando por los gráficos, este fue el primer juego que utilizó el nuevo motor gráfico de la compañía de Carmack: El Id Tech 5.Y lo implementaron de putisima madre, pues la fluidez extrema que atesora no ha sido superada por casi cualquier ningún otro juego de esta generación. Haciendo que los tiroteos y demás encuentros jugables vayan como la seda. Si, tenía sus errores, como la típica carga tardía de texturas que hacía que los personajes y entornos estuvieran poco definidos durante un par de segundos, pero cuando tenías ese ritmo de juego tan fluido cuando el caos y las explosiones te rodeaban por doquier, se le perdonaba. Además de que tenía un cierto toque Cell-Shading mucho más vistoso y cuidado que la obra de Gearbox software que le daba un encanto especial.
¡ESO TE PASA POR APARCAR EN DOBLE FILA DURANTE MI GUARDIA!
Pero ya entrando a trapo con lo que lo hacía una obra completamente original os preguntaré esto: Muchos FPS apocalípticos te obligaban a ser el correveidile del Yermo y te forzaban a petarte el mapeado de un lugar a otro cumpliendo recaditos. Pero ¿Cuántos de ellos te ofrecían un puto bólido con ametralladoras y lanzacohetes para moverte libremente por el entorno? ¡Ahhh amigo! ¿A que ahora la cosa cambia? Desde el primer momento tenías tu propio coche completamente personalizable para moverte con libertad por el Yermo.
Incluso te obligaba a explorar el mapeado de esta forma. Pues los desiertos y carreteras estaban custodiados por cientos de bandidos que te querían emboscar con sus fortalezas sobre ruedas. Por lo que siempre te tocaba reventar vehículos enemigos a cohetazos desde tu flamante buga al más puro estilo Twisted Metal o Vigilante 8. Y lo cierto es que esa ambientación desértica postapocalíptica meintras conducías conseguía hacete sentir como si estuvieras en mitad de la jodida Mad Max 2! Era sensacional tios… Y siempre te apetecía hacerlo, nunca te cansabas. Pues cada vez que lo hacías te recompensaban con pasta y recursos. Hacer de guardia de tráfico nunca había sido tan divertido…
Pero esto no se quedaba en un mero añadido. Los vehículos eran toda una mecánica jugable más. Porque ahora viene lo bueno: Las Carreras del Yermo. Si querías ganar pasta y mejorar tu vehículo o comprar uno nuevo, podías participar en las cientos de carreras que se sucedían en el Yermo. Como si un juego de coches más se tratase nos poníamos a echar carreritas, rallies de checkpoints y demás eventos competitivos por todo el mapa. Y tomad buena nota de lo que os mencioné sobre los gráficos, porque echar esas carreras reventando a otros corredores a cohetazos y a toda hostia con cientos de explosiones y efectos a tu alrededor de una forma fluidísima, era un jodido espectáculo visual y jugable. Te lo pasabas como un puto crio. Era como jugar a la versión adulta y sangrienta de Mario Kart…
SIEMPRE SUPE QUE MIS PROBLEMAS CON EL JUEGO ACABARÍAN CONMIGO…
Pero aún teníamos muchas más cosas que hacer que disparar andando o disparar conduciendo. El juego no se reducía a echar carreras y hacer recaditos a pie. También teníamos otras actividades que podíamos repetir siempre que queramos. De entre todas ellas, mi favorita era Mutan Bash TV. Un Reality show al que podíamos entrar siempre que quisiéramos cuya premisa era: Matar mutantes por pasta. Cuanto más matemos y con mayor estilo, más pasta ganaríamos. Era como unas especie de modo horda con espíritu arcade y combos que nunca nos cansábamos de jugar.
Incluso el arsenal del juego era todo un puntazo. Aunque algunas armas eran los estándares típicos que nos encontrábamos en los shooters, otras en cambio eran las típicas sobradas bien burras que se le ocurrían a ID software. Como los Windsticks por ejemplo, boomerangs caseros con cuchillas que rebanaban la cabeza de los enemigos como si pomelos se tratasen. El BFG tampoco faltaba a la cita en forma de munición especial o los ya clásicos RC-XD. Por no hablar de la ballesta multifunción que, aunque parezca la típica ballesta que vemos en los otros shooters, con esta podíamos valernos del entorno para eliminar a nuestros enemigos.
¡RÁPIDO! ¡USA LA CONCHA AZUL PARA PONERTE EN CABEZA!
Por ejemplo, podíamos disparar a un charco de agua con los virotes eléctricos o disparar los virotes incendiarios si el charco era de aceite, para eliminar a un gran grupo de enemigos que corrían la desgracia de estar justo encima. Hasta teníamos virotes de control mental para poseer a enemigo y que hicieran el trabajo sucio por nosotros. Lo sé, Esta arma ha copiado a todos los plásmidos de Bioshock ella solita… Pero no por ello deja de molar. A fin de cuentas lo han copiado bien…
Y si con todo esto no quedabas satisfecho, contabas con un modo multijugador. Un multijugador que, lejos de ser un añadido de mierda de última hora como en la gran mayoría de shooters, resultó ser uno de los más divertidos que he jugado en la pasada generación por 2 sencillas razones: Misiones Cooperativas y Carreras Competitivas. Si querías seguir pegando tiros pero con un colega, el Modo “Leyendas del Yermo” te ofrecía misiones sueltas con su propia historia para ello. Pero el modo «Carreras del Yermo» era una total vuelta de tuerca y el añadido más original de juego. Porque era eso: Las mismas carreras que podías hacer en la campaña, pero contra jugadores reales. Vamos que sin comerlo ni beberlo el juego pasaba a ser el modo multijugador del Mario Kart o del Blur.
Pero dejo lo mejor para el final, y es sin duda la posibilidad de jugar a pantalla partida con un colega todos los modos de juego sin restricción. Os parecerá poca cosa, pero con un coleguilla, un par de mandos de la PS3, unas patatuelas y unas cervecitas en tu habitación, son las risas aseguradas. Hombre, si me apuráis os diré que el bajón gráfico o downgrade resultante de jugarlo a pantalla partida es considerable pero, en una generación saturada con modos multijugador online, este añadido se agradece como agua de mayo.
ADMITÁMOSLO, TANTO DISPARANDO COMO CONDUCIENDO, EN PANTALLA PARTIDA CON UN COLEGA ERA UN TODO UN PASOTE.
Si, puede que todo esto junto no sean más que mariconadas, pequeñas novedades jugables que puede que no lleguen a ser mucho por si solas. Pero que todas ellas juntas consiguen darnos un producto jugable redondo que, por muy escéptico que te seas, te acaba ganando. Todo esto es su conjunto nos da como resultado un shooter con Alma y personalidad propia que hace las delicias de cualquiera que se anime a jugar.
Por todo eso os animo encarecidamente que le deis una segunda oportunidad. No dejéis que una duración relativamente escasa y un final decepcionante os pesen más que sus méritos jugables y haceros con él en cuanto lo veáis. Seguro que lo encontráis muerto de risa y casi regalado en cualquier tienda especializada. O mejor aún, compraros la versión de PC en Steam en cuando baje de precio y os aseguro que serán los 3€ mejor invertidos de vuestra vida.
Bueno, esto es todo por hoy. Espero que os haya gustado la reseña. Un Saludo a todos.