The Curse of Monkey Island

Atreides Aventura Gráfica, Elaine Marley, Guybrush Threepwood, Jonathan Ackley, Larry Ahern, LeChuck, lucasarts, Murray, Videojuegos

Monkey Island 2: LeChuck Revenge fue un fracaso. La que puede ser mejor aventura gráfica de todos los tiempos se la pegó y apenas vendió unas miles de copias, en torno a 25.000 según Tim Schaffer. Además, todos se fueron. Ron Gilbert fundó Humongous Entertainment, Dave Grossman se fue para colaborar con él, Tim Schafer … Sigue leyendo The Curse of Monkey Island

Gibbous. A Cthulhu Adventure

Atreides Aventura Gráfica, comedia, fantasía, Fishmouth, Grim Fandango, Lovecraft, lucasarts, Monkey island, Stuck In The Attic, Transilvania, Videojuegos

En estos últimos años se han multiplicado los juegos inspirados en Lovecraft. Darkest Dungeon, Conarium, Call of Cthulhu o The Sinking City han salido estos últimos años pero, la mayoría han salido flojillos, siendo lo mejor la ambientación. Afortunadamente este no es el caso. Stuck In The Attic, estudio independiente de Transilvania (Rumanía) formado por … Sigue leyendo Gibbous. A Cthulhu Adventure

El Poder de la Fuerza 2. El lema es: Menos es más.

Erik Reenberg Boba Fett, Darth Vader, El Poder de la Fuerza, Juno Eclipse, lucasarts, Star wars, Starkiller, Videojuegos

Es una mejora. El primer cumplido que se me ocurre para este juego es ese. Mejora respecto al original, por desgracia no llega a mejorar lo suficiente como para decir, es un gran juego. Se queda en aceptable porque sigue cargando con unos cuantos problemas y añade uno nuevo. El original ya era bastante corto, […]

El Poder de la Fuerza. La Debacle de la Nostalgia.

Erik Reenberg Darth Vader, El Poder de la Fuerza, lucasarts, Star wars, Starkiller, Videojuegos

Dadme fuerzas midiclorianos míos. Dadmelas, pero las justas o mato a alguien. ¿Cómo empeora tanto un juego de hace menos de diez años? No lo recordaba tan horrible. Empiezo a sospechar que la versión de PSP (La primera que jugué, contenía la mejor historia y mecánicas). Ha sido horrible, por suerte es insultantemente corto y […]