Sufrí mucho en su momento para escribir sobre el primer NieR. Daba por sentado que, por mucho que me esforzara, no podría llegar a hacerle justicia; es tan simple como que no tengo la habilidad necesaria para plasmar sobre el papel todo lo que supuso para mí. Aun así, lo intenté, y dentro de lo que cabe me sentí satisfecho. Con NieR Automata estoy pasando exactamente por lo mismo. Es una buena señal, ¿verdad? El saber que esta nueva obra despierta en mí las mismas inquietudes que aquella historia de hace tres años… Es alentador.
Sin tapujos.
Sin censura.
Sin secretos.
Hablemos de NieR Automata.
AVISO: En este texto se destripa todo NieR Automata, si no has conseguido los finales A, B, C, D y E debes cerrar la página ahora mismo.