Acerca de Cartridge Inside

Creado a finales de 2011, en un principio en formato web pero poco más tarde transformado en un canal de YouTube, la historia del proyecto Cartridge Inside no es corta. Tras 3 años de árduo trabajo en el ámbito audiovisual a un alto nivel, diferentes formatos y casi un millar de suscriptores, éste renace en forma de una nueva web. Nuevos propósitos, nueva gente, nuevos objetivos, pero la misma ilusión con la que el proyecto se formó el primer día.

No somos más que un grupo de amigos dispuesto a dedicar su tiempo libre a reflexionar y escribir sobre su mayor pasión y hobby: los videojuegos. Debido a que Cartridge Inside es una publicación amateur, no poseemos de grandes recursos técnicos ni económicos para invertir en nuestras entradas. Pese a esto, nada nos impide poner todo nuestro esfuerzo en buscar un resultado lo más profesional posible.

Tenemos algunas ideas muy claras:

– Todo redactor de Cartridge Inside sabe que, cuando escribe un artículo, está dando su punto de vista. Entendemos que nuestras opiniones no son infalibles y que no gustarán a todos, pero ahí está la gracia: intentamos explicaros lo mejor que podemos qué os vais a encontrar con tal o cual juego y luego comentamos, de forma subjetiva, aunque siempre justificable, las sensaciones que hemos tenido. A partir de ahí, lo que más ilusión nos hace es que nos contradigáis, nos deis la razón o aportéis más información. En definitiva, intentamos daros información útil y una buena base para debates constructivos.

– Nuestras opiniones pueden ser más duras o más suaves, pero siempre hablaremos desde el respeto. Que en ocasiones hablemos con un lenguaje más duro no impide que sintamos una tremenda admiración sobre la persona o tema a la que nos refiramos.

– Ninguno de nuestros redactores siente una adoración extrema o forma parte de los bandos formados por los llamados fanboys de alguna de las empresas de esta indústria. Entendemos que en los matices se encuentra la verdad y que nada es blanco o negro. Es inevitable en ocasiones mostrar admiración hacia alguna de las empresas creadoras de esos juegos o consolas con las que hemos crecido, pero eso en ningún momento cuestiona nuestra neutralidad, teniendo total libertad para expresar todos nuestros puntos de vista; sean positivos o negativos.