Análisis: Wolfenstein: The Old Blood

sergiosrrubio Uncategorized 4 Comments

 

¿Qué es para vosotros una buena expansión? Un añadido que nos ofrece muchas más horas de juego para disfrutar de nuestro título favorito, diréis. Correcto a la primera, si señor. Pero, ¿Qué es una buena expansión para un Wolfenstein? Pues si venimos de matar nazis, pues MATAR MÁS NAZIS. Seguir derramando sangre teutona de las formas más bestiales e imaginativas posibles es todo lo que podría ofrecernos esta increíble expansión. Pero esta expansión que nos ocupa está muy lejos de quedarse solo ahí.

Ya que, los genios de MachineGames con esta expansión han conseguido realizar lo que a estas alturas de la industria parecía algo añejo e inalcanzable: Hacer una expansión como las de antes: De generosa duración, manteniendo la fórmula jugable que hizo grande al juego original, pero con suficientes novedades y añadidos para considerarlo como una nueva entrega en la franquicia. Señoras y señores, tengo el orgullo de presentaros la que yo considero como la Doom 3 Resurrección del Mal o La CoD: Gran ofensiva de esta generación: Wolfenstein: The Old Blood

 

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150519162728

 SI HASTA LA PANTALLA DE TÍTULO ES LA REHOSTIA!

TODO UN ALUCINANTE  HOMENAJE AL CLÁSICO DE ID

 

Comenzando por su historia, estamos ante una precuela que nos sitúa un poco antes de los acontecimientos ocurridos en The New Order. Bajo esta excusa argumental tan socorrida en los videojuegos, una vez más encarnamos a BJ Blazkowicz en una misión que rescata una de las localizaciones más clásicas de la franquicia: El castillo de Wolfenstein. Una vez más nos infiltraremos en el enigmático castillo rebanando, tiroteando y destripando nazis como siempre, pero esta vez con el objetivo de recuperar unos documentos secretos que contienen información sobre la localización del complejo del General Calavera.

 

De esta manera el juego sirve de gancho argumental que enlaza (Un poco forzadamente) con el comienzo del anterior. También sirve para revisitar y darles otro enfoque a personajes y antagonistas clásicos de la franquicia. Como Kessler o el Agente 1 de Return to Castle Wolfenstein que vuelven con personalidades mucho más desarrolladas. Y hasta uno de sus antagonistas más recordados regresa como uno de los enemigos finales del juego: Helga Von Bullow (Aquí llamada Von Schabbs) la psicópata arqueóloga Nazi obsesionada con el ocultismo. Y podremos saber más de estos personajes buscando y leyendo documentos que nos encontramos durante la aventura, muy al estilo Bioshock.

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150517131208

SEÑORITAS, OS ECHABA MUCHO DE MENOS

 

Aunque si os digo la verdad, la historia, a pesar de estar muy interesante y mejor desarrollada, no me importaba un carajo. Lo único que buscaba era otra excusa bajo la forma de una historia solvente, para seguir tiroteando Nazis y disfrutar de genocidios desmesurados tal y como hacía en The New Order.
Y ahora sería el momento en el que debería enrollarme hablando sobre el apartado gráfico del título, pero ¡A la mierda! No hay mucho más que añadir más allá del desfile de alabanzas que ya le dediqué durante el análisis del The New Order. Solo deciros que el mismo y apabullante nivel técnico que disfrutasteis con él, lo disfrutaréis con este. Volveremos a deleitarnos con fluidas matanzas a 1080p y 60 Frames por segundo sin ningún problema con toda la espectacularidad que ofrece el nuevo IDTech 5. Ninguna queja. Todo sigue pintando tan genial como antes.

 

Y ya vamos a lo que más importa. Averigüemos como se lo monta esta expansión. Jugablemente, la deliciosa fórmula de shooter old school con armas bestiales, salud por botiquines y armaduras que tanto encumbró The New Order, aquí se mantiene impecable e igual de divertida. Una vez más volveremos a disfrutar masacrando nazis con una ametralladora a cada mano. Volveremos a encarnar al hijo predilecto de Rambo llevando escopetones más largos que la cola del paro en akimbo. Los maravillosa fluidez y bestialidad de los tiroteos que hizo gala su predecesor, vuelve a hacer acto de presencia en su expansión para coronarse como el Nirvana de los shooters.

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150520141820

¡HORA DE CAMBIARTE LAS CAÑERÍAS SOCIO!

 

También vuelve el sigilo y la infiltración. Al igual que con The New Order, la opción sigilosa sigue siendo igual de viable que la de entrar a saco, e incluso mucho más profunda y elaborada que en el anterior título. Aquí hasta se nos fuerza en algunas situaciones a optar por el sigilo y los guardias enemigos estarán mucho más espabilados que en la anterior entrega. Aunque por espabilados me refiero a que no llegan a ser los topos subnormales que eran en The New Order. Pero bueno, no deja de ser una mejora considerable con respecto al anterior. Y es todo un acierto que el juego nos obligue a ser un poco más concienzudos y precavidos a la hora de optar por el sigilo. Pues la sensación de completarnos un nivel entero sin ser visto es toda una recompensa que nos hace sentir como el más letal de los ninjas.

 

Podría quedarme ahí y el juego seguiría siendo toda una joya si tan solo se limitará a repetir la fórmula del anterior. Pero nada más lejos, puesta expansión viene cargadita de novedades y contenido que hace que no tenga nada que envidiar respecto a un juego completo. Respecto a sus novedades, tenemos una nueva variedad de armas y letales juguetitos a nuestra disposición. Desde cañones antiaéreos que el juego se atreve a llamar escopetas, pasando por pistolas lanzacohetes hasta el clásico rifle de cerrojo que tanto echaba de menos en los juegos de la segunda guerra mundial. El clásico sonido del cerrojo abriéndose y cerrándose tras reventar un cráneo humano sigue siendo tan enormemente satisfactorio como lo recordaba.

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150520141654

¿PROBLEMAS DE AUDICIÓN? ¡GAAAES!

 

Pero de entre las armas más estrambóticas y alucinantes que el juego nos ofrece, me quedo con el “Cacho Tubería” Si, como lo estáis leyendo, un trozo de tubería. Pero no lo subestiméis, pues en manos de BJ se convierte en un arma de destrucción masiva y la herramienta idónea para sacarte de cualquier situación. Por lo visto BJ en esta entrega es lo más parecido a un MacGyver a la antigua y utiliza un cacho de tubería para absolutamente todo. Como arma cuerpo a cuerpo para matar a los nazis sigilosamente (Hay un extraño gozo en apuñalar a un nazi con una tubería y ver como su sangre brota de la cañería de la misma…) como piolet improvisado para escalar, como palanca para abrir puertas y rejillas de ventilación. Joder déjale un par de minutos más y te la usará como llave Allen para cualquier mueble de Ikea…

 

Aunque este juego no se limita a darnos más de lo mismo pero con unos cuantos juguetitos nuevos. Cuando he dicho que el juego ofrece cantidades industriales de contenido, lo mantengo y lo respaldo con toda confianza. Ya solo el juego base nos da unas más que generosas 6-8 horas de duración. Os lo puedo corroborar que estuve todo el fin de semana dándole duro y no acabé el juego hasta ayer mismo. Y si ya solo el juego base de esta expansión nos ofrece casi la misma duración que cualquier otro juego completo o FPS del mercado, eso debería granjearnos todo el respeto que esta expansión se merece. Pues MachineGames siempre podría haber tirado a lo fácil y darnos una expansión cutre que no llegue ni a las 3 horas de duración como tan malamente estamos acostumbrados. Pero no, los ex de Starbreeze se han tomado su tiempo para conseguir ofrecernos una experiencia tan completa como la de cualquier otro shooter del mercado. Y eso es EL BIEN.

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150519130442

Y JUSTO CUANDO CREÍAS QUE LA COSA NO PODIA MEJORAR… ¡PUTOS ZOMBIES NAZIS!

 

También la variedad que presenta la expansión es enorme. Haciendo que no nos sintamos aburridos en ningún momento. Justo cuando creías que podrías hartarte de rebanar cuellos y tirotear nazis en el castillo de Wolfenstein, el juego en su 2ª mitad da un completo giro de 180º y nos pone con una escopeta recortada a reventar putos zombies nazis. Cuando creías que la cosa podría volverse repetitiva, a bote pronto el juego pasa de ser un matanazis a un juego de zombies. También tendremos los clásicos jefes finales que nos tocará bañar en plomo mientras nos aprendemos sus patrones de ataque. Esta expansión es como si fuera una sinergia perfecta entre juego clásico y popurrí de modas actuales en los juegos de acción, pero bien hecho.

 

Y la cosa no se queda ahí. Completar la campaña solo es una parte de todo lo que esta expansión nos ofrece. Pues también como en el Wolfenstein anterior, durante la campaña tendremos cantidades de habilidades y mejoras por desbloquear si cumplimos determinados objetivos o nos afianzamos a un estilo de juego determinado. Por ejemplo matar a X Nazis con armas dobles desbloquea una ventaja que nos proporciona el doble de munición. Matar sigilosamente a X con la tubería o el puñal nos desbloqueará salud vampírica y así un largo etc… También tendremos un montonazo de coleccionables y extras que nos invitará a curiosear y descubrir más el universo en donde se desarrolla esta precuela muy al rollo Bioshock y similares.

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150518204422

Y ENCIMA NOS AÑADEN UN DIVERTIDÍSIMO MODO HORDA, CON EL QUE NOS VICIAREMOS DE MALA MANERA

 

Pero lo mejorcito que ofrece este título es sin duda el modo desafío. ¿Que es lo último que le faltaría a un Wolfenstein de MachineGames para potenciar aún más si cabe su jugabilidad? Pues un modo horda. Y eso es el modo desafío. Un modo horda cronometrado en donde se nos pone a matar todos los nazis posibles dentro de un límite de tiempo para conseguir la mejor de las puntuaciones. No os voy a negar que un cooperativo en este modo hubiera quedado de lujo, pero este modo es una excusa perfecta para viciarnos todavía más con él.

 

Es el complemento perfecto para cogerlo cuando nos apetezca relajarnos con unas cuantas matanzas rapiditas y sin compromiso. Además de que nos picaremos de lo lindo con ese modo para reventar los marcadores y conseguir la medalla de oro en cada mapa. Es como si hubieran metido el modo desafío de los Batman Arkham en Wolfenstein y por alguna extraña razón quedará magníficamente bien. Francamente eso es lo mejor que podría hacer un título actual para potenciar su rejugabilidad. ¿Que te pide el cuerpo matar sin historias ni complicaciones? Pues entra en el modo horda y a disfrutar con el genocidio. Si el resto de las compañías tomaran buena nota de esta tendencia, pero lo hicieran tan condenadamente bien como en este juego, los ya mencionados de Rocksteady, o los Gears of War sin ir más lejos,  nuestros juegos durarían mil veces más sin necesidad de recurrir a multijugadores cutres metidos con calzador.

 

Wolfenstein®: The Old Blood_20150519132952

NIVELES DEL WOLF 3D CLÁSICO, MODO HORDA, CAMPAÑA LARGA Y REJUGABLE, CIENTOS DE SECRETOS Y DESBLOQUEABLES

MÁS QUE UNA EXPANSIÓN, ES UN JUEGAZO COMPLETÍSIMO

 

Y para los complecionístas y los obsesos compulsos de finiquitar juegos de entre los que se incluye un servidor, la duración de esta expansión se triplica si lo que queremos es completarla al 100%. Pues tendremos cientos de coleccionables y zonas secretas que descubrir, diarios y oro que recolectar… Incluso niveles del clásico Wolfestein 3D a rejugar. Como lo estáis leyendo. No contentos con meter un easter egg del original de ID software, los de MachineGames han rizado el rizo y han metido todo el capítulo 1 del Wolfesntein original. En forma de pesadilla nos chuparemos de nuevo todos los niveles. Y, coño, más allá de la simple curiosidad, no dejan de ser divertidos. Hablando ya claro: Tenéis juego para rato. Lo justo para comprároslo en físico sin llegar a arrepentiros en ningún momento. Los 20 míseros euros que vale, los amortizas hasta el último céntimo.

 

En resumen. Tenemos mucho más que una simple expansión, es la mera definición de una buena expansión como las de antaño. Un producto que continúa ofreciéndonos todo lo que nos divertía de su predecesor, nos añade un montonazo de novedades jugables, al mísmo tiempo que un porrón de contenido. Una campaña con una duración que, a pesar de su condición de expansión, se mea en la de los shooters actuales. Y sobretodo, un especial cuidado y mimo por desarrollar una experiencia grata a los jugadores. Para mi este es el equivalente al «Doom 3 La resurrección del Mal «en esta generación. Una expansión larga, con novedades que sabe cómo explotar lo que funciona e innovar lo suficiente como para divertirte incluso más que una nueva entrega. Una vez más, Bravo por MachineGames, el trabajo de estos tíos te hace recuperar la fe en los buenos shooters.

 

NOTA: 9

 

Y aquí acaba la reseña de hoy. Espero que os haya gustado Un Saludo.

sergiosrrubioAnálisis: Wolfenstein: The Old Blood