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De la mano del estudio japonés Picorinne Soft llega este título que rinde culto a aquellos clásicos shoot em’ ups de scroll horizontal en dos dimensiones como R-TYPE, Axelay o Gradius con una calidad técnica tan bien lograda que fácilmente podría hacerse pasar como un shoot em’ up de la era de los 16 bits.
Daisuke Amaya mejor conocido como Pixel es un desarrollador indie japonés que durante sus tiempos libres dentro de un espacio de cinco años se dedicó a programar este título que originalmente se llama Dokutsu Monogatari llevando la escena homebrew de los videojuegos hacia nuevos horizontes de tal manera que ahora poseen la capacidad de medirse de tú a tú con los títulos AAA de las grandes desarrolladoras.
De la mano de Exploding Rabbit llega este impresionante título que, a primera vista puede parecer un hack de Super Mario Bros., pero que realmente es un divertido videojuego que nos hace vivir todo el encanto de Super Mario Bros. desde una perspectiva un tanto diferente, ya que podemos jugar con personajes de otras franquicias como Contra, The Legend of Zelda, Metroid, Megaman, Castlevania o Ninja Gaiden por mencionar unos cuantos.
Tras el éxito arrollador e inesperado de la primera entrega, Will Wright y su equipo pusieron manos a la obra para crear una secuela digna de su predecesor y que a su vez revolucionara el género, añadiendo una gran variedad de innvaciones para terminar construyendo el imperio urbano de nuestros sueños… O de nuestras pesadillas.
Lunaris es una versión mejorada de un videojuego que fue creado en menos de cinco horas por Jonathan Cauldwell para el extinto concurso ORSAM en el año 2004 que toma inspiración del famoso título de Atari lanzado para arcade llamado Gravitar, pero no es un simple port o copia, ya que Lunaris posee características que lo hacen único, de hecho gracias a estas mejoras Chronosoft le ofreció a Cauldwell la distribución del mismo, pero declinó la oferta y lo lanzó como freeware a modo de regalo para los entusiastas de la ZX Spectrum.
En la década de los noventas, Amstrad estaba consolidada como uno de los mayores fabricantes de computadoras del mundo, pero había un mercado en el que dos grandes compañías japonesas se encontraban batallando para ver quién podía llevar más equipos a las casas y lógicamente vieron una oportunidad de entrar en ese sector para ver que tan lejos podían llegar y dicho sea de paso llenar sus bolsillos, pero la realidad fue otra como veremos a continuación.
