Terminó.
Mucho más tarde de lo que creía pero ha sido en 2020 cuando la saga de ciencia ficción más importante de todos los tiempos ha terminado. Con su excentricidad, comenzando una saga «in media res», por el capítulo IV, el que luego se bautizó «Una nueva esperanza» en uno de los títulos más acertados de todos, con su ingenuidad, con su aventura, su rebeldía y su capacidad para hacer soñar.
Antes de continuar, aviso que hay spoilers, mejor leer la entrada habiendo visto la trilogía.
Tengo que aclarar que soy un fan clásico. Vi «El retorno del Jedi» en el cine cuando se estrenó y fue esa la primera que vi en el cine, aunque recuerdo vagamente que hubo una copia pirata por casa grabada en Beta de Star Wars que se veía horrible y luego ya las vimos en VHS. las he visto muchas veces y las tengo en varios formatos, de VHS a Blu-Ray, me han acompañado a lo largo de los años y desde luego mi trilogía favorita es la original, siendo mi película favorita Star Wars: Una nueva esperanza, aunque El imperio contraataca sea mejor, disfruto más con la primera.
Para mi fueron una decepción importante las precuelas. El Episodio. I La amenaza fantasma me pareció infantiloide y decepcionante con unas batallas muy mal rodadas aunque grandes aciertos como esa actualización de la carrera de cuadrigas de Ben-Hur o un personaje que podría haber dado un gran juego como Darth Maul. Peor aún me pareció El episodio II El ataque de los Clones que tiene el romance más falso, con horribles diálogos y menos química aún, incluyendo el paseo en pulga gigante, además de tener más ración de Jar-Jar Binks.
Al menos el Episodio III, La venganza de los Sith, mejoraba bastante a las dos películas anteriores con la transformación de Anakin en Darth Vader que no estuvo mal a pesar de que el actor está bastante pasado de rosca y seguía siendo más floja que la trilogía original.
Esta trilogía para mi fue un tanto decepcionante así que, cuando George Lucas venció a Disney toda su franquicia no me dio tanta pena como hubiera sido normal. Entre esta trilogía que intentaba convertir la saga en un producto de merchandising para niños y que acababa de jugar el último juego de Star Wars que había aparecido, Kinect Star Wars, no podía estar más seguro de que se habían quedado sin ideas.
Con esta venta a Disney lo que esperaba es que esta metiera mucho dinero y contratara a los mejores talentos para hacer los nuevos productos de la franquicia. Me preocupaba que se perdiera el corazón, el alma de Star Wars porque ya no estría George Lucas detrás, mientras que en cambio se ganaría a gente muy talentosa creando nuevos cómics, nuevos juegos (ejem) y nuevas películas.
Entonces, diez años después del Episodio III, La venganza de los Sith comenzó la nueva trilogía. La continuación de El retorno del Jedi, por fin íbamos a saber qué había pasado después. Por ese lado me apetecía muchísimo. Por otro, era lo que esperaba, que contrataran a gente de gran talento y en ese caso fue J.J. Abrams, que había resucitado por todo lo alto a Star Trek con sus dos películas y fue el encargado de dirigir El episodio VII, El despertar de la fuerza.
Todo prometía muchísimo y la trilogía me ha resultado muy interesante. Mucho mejor que las precuelas, sin duda alguna, pero para mi, aunque por debajo de la trilogía original, he disfrutado con la continuación, con el reencuentro con Han Solo, Leia Organa, Luke Skywalker, Chewbacca, R2D2 (Arturito para los amigos), C3P0, incluso Lando Calrissian que han mezclado realmente bien con los nuevos personajes de Rey, Finn o Dameron Poe. Incluso R8 me ha parecido un droide a la altura de sus otros compañeros.
En cuanto a la historia, en esta última parte se retoma el impactante final de Los últimos Jedi, regresando Palpatine y con Kylo Ren como Líder Supremo de la Primera Orden. En paralelo, la resistencia, con Rey a la cabeza, se preparan para enfrentarse La Primera Orden, sin saber aún que ha regresado el emperador Palpatine, interpretado de nuevo por Ian McDiarmid.
La película conjuga espectacularidad con unas secuencias de acción de una calidad enorme. El director vuelve a ser J.J. Abrams, después del paréntesis de Rian Johnson en la anterior, y parece que curado de su adicción al Lens Flare. Dirige la historia con buen pulso, con momentos álgidos que comienzan revelando quién era realmente El líder Supremos Snoke y qué implicación ha tenido Palpatine en todo.
El entrenamiento de Rey como Jedi es otro de los grandes momentos de la película por un lado porque por un lado recuerda al de Luke en Dagobah con Yoda pero al tiempo es muy distinto y mucho más espectacular, es lo que tienen 39 años de mejoras en los efectos especiales.
La otra parte es la increíble recreación de Leia Organa, que es quien dirige su entrenamiento. Carrie Fisher falleció en 2016 pero han conseguido recrear al personaje de Leia con su imagen y que no se note nada. Hay un flashback en que recrean de jóvenes a Luke, también asombrosamente bien, y a Leia no tan bien, pero la recreación de la Leia actual es perfecta.
Ese ascenso de poder de la primera Orden en una alianza impía con el macabro Palpatine, que de nuevo cuenta con un arma capaz de destruir mundos pero en cada uno de sus cruceros, como descubre el planeta Kijimi, hace que tengan que acelerar todos los preparativos e ir al planeta Exegol a intentar parar todos esos cruceros antes de que se desplieguen y destruyan la galaxia.
En paralelo, la relación de Kylo Ren y Rey es ambivalente. Tan pronto se intentan matar como deciden no hacerlo y empiezan a conocerse más, en buena medida a través del vínculo mental que les une y que está muy bien recreado.
La evolución de Kylo Ren como sucesor de Darth Vader (su abuelo) es digna de mencionar. En el Episodio VII era poco más que un niñato airado y poderoso, capaz de matar a su padre, Han Solo, por seguir los designios de la Primera Orden y del Líder Supremo Snoke. Sin embargo solo es poderoso comparado con los demás que no dominan al fuerza. Cuando se enfrenta con Rey, que no tiene entrenamiento, termina derrotado.
En el Episodio VIII evoluciona y va más allá que su abuelo, el cuál siguió a al emperador Palpatine como su mano derecha, y asesina al Líder Supremo Snoke proclamándose él mismo Líder SUpremo, pero empieza a mostrar ambivalencias respecto a su enemiga, Rey, y esto en parte potenciado por el propio Snoke, que lo pagó caro creyendo que, al vincularlos conseguiría atraerla a ella y que él se hiciera más fuerte matándola. No funcionó.
Es en esta tercera parte dónde se sucede la redención de Kylo Ren, un arrepentimiento cada vez mayor por matar a Han Solo y un aprecio mayor hacia Rey, que le va a llevar a enfrentarse a Palpatine que le ofrece el universo.
El resultado es un villano con una evolución interesante, bien interpretado, pero que creo que le falta fuerza. Termina siendo un personaje mucho más interesante de lo que parecía en el Episodio VII pero es la aparición de Lord Palpatine lo que da auténtico empaque a la película y la dota de un villano de mucha más calidad, repugnante, manipulador y poderoso.
La revelación de los padres de Rey es otro de los momentos de la película y su enfrentamiento con Palpatine y como intenta manipularla es de lo mejor, mostrando al emperador como ha sido siempre, un maestro manipulador que utiliza todos los elementos del poder, sea la Fuerza o la política. O como en este caso el chantaje.
En cuanto a los protagonistas, creo que los tres hacen un gran trabajo. Rey (Daisy Ridley, Asesinato en el Orient Express), que tiene que aguantar muchos primeros planos, soporta ser protagonista de una saga tan importante como Star Wars francamente bien, como nunca lo consiguió Hayden Christensen en las precuelas, por ejemplo.
Finn (John Boyega, Pacific Rim Insurrección) el Stormtrooper renegado está muy bien, probablemente siendo esta tercera película en la que mejor luce.
El que funcionó muy bien desde la primera fue Oscar Isaac (Ex-Machina) haciendo de Poe Dameron. Con un carisma arrollador, recuerda enormemente a Han Solo, pero lo hace tan bien que incluso cuando se encuentra con Han Solo aguanta el tipo. Si hubieran encontrado a alguien así para la película «Solo» habría tenido mucho más reconocimiento del recibido.
Son estos tres personajes los que llevan a término una saga de nueve películas y dos spin-offs, aparte de decenas y decenas de novelas, series, cómics y videojuegos, y una historia que ha durado 43 años. El resultado ha sido maravilloso. Quizá esta película en sí no sea la mejor, pero es una buena película de Star Wars y un cierre más que digno a la saga.
Puede que haya más películas que exploren otras historias, pero la saga de los Skywalker al fin está completa y, para mi, ha merecido la pena la espera.
Por otro lado no puedo dejar de preguntarme ¿Este era el sueño de George Lucas o hubiera sido diferente si siguiera al frente en lugar de asesorar?
Saludos fremen