Continuamos con los especiales de lucha con este juego desarrollado por Capcom y con port de Probe para la versión de PC y PSX con la Patrulla-X de protagonista.
La razón de jugar a esto y no a ningún otro fue por una curiosa coincidencia. Como contaba el otro día en la visita a la Madrid Games Week, uno de los oyentes de El Batallón Pluto, Pablo Nova, trajo desde Japón la versión de Saturn de X-Men Children of the Atom. La verdad es que acertó, soy muy fan de los X-Men desde que leí el número uno de Fórum, Segunda Génesis de Chris Claremont y Dave Cockrum. No tengo la Saturn, pero me entraron ganas de jugarlo y ver qué tal el juego porque si lo llegué a jugar sería hace veinte años al menos. Desgraciadamente no tengo la Sega Saturn, así que decidí emularlo y fue un desastre, no funcionó en ninguno de los cuatro emuladores que utilicé. Por tanto, decidí recurrir a la versión de Playstation y jugarlo en la Playstation mini con el Fighting Stick Mini de Hori.
Es un juego cuya primera versión fue la de recreativa y Sega Saturn en 1994 y posteriormente salió en PC en 1996 y por último en PSX en 1998.
La famosa serie de animación de X-Men de los 90
Era la época de mayor popularidad de los X-Men: el X-Men 1 de Claremont y Jim Lee había vendido 7,5 millones de ejemplares y la serie de dibujos tenía muchísimo éxito. Capcom, que ya había hecho The Punisher para Mega Drive y X-Men Mutant Apocalypse para Super Nintendo decide hacer un juego de lucha con los mutantes contando con las voces de los actores de la serie.
En principio, es un enfrentamiento contra Magneto y los enemigos más poderosos de los mutantes para evitar que controlen la Tierra para los mutantes.
En realidad, no tiene demasiada coherencia porque antes de llegar a los jefes finales te enfrentas con todos los personajes, sean de la Patrulla X o los villanos. Se supone que es una adaptación libre del crossover Atracciones Fatales, cómic de los X-Men del año 93 de Scott Lobdell y Fabián Nicieza escribiendo y con los hermanos Kubert, Greg Capullo, Joe Quesada o John Romita Jr a los lápices.
Cuenta con un plantel muy de la época con Lobezno, Tormenta, Cíclope, Coloso, El hombre de Hielo o Mariposa Mental por parte de la Patrulla
Y con Rojo Omega, un Centinela, el Samurai de Plata o Espiral como villanos. Son personajes de distintas épocas que en los cómics creo que nunca han formado equipo.
Los jefes finales son el Juggernaut, y Magneto, por supuesto.
En total, 10 personajes seleccionables, tanto para el modo arcade como para el modo Versus,una cantidad ínfima para lo habitual y de hecho en los juegos posteriores de la franquicia Marvel Vs. Capcom de la que es un ensayo claro, siempre serán muchos más personajes.
El sistema de lucha es heredado de Street Fighter II Turbo. Tres botones para puñetazo ligero, mediano y fuerte, tres apra patadas igual, boton de correr y botón de saltar. Hay una barra para rellenar el X-Power que cuando se llena permite utilizar o una Habilidad o un ataque Hyper X. Una pena que no haya modo para entrenar y que no vengan los movimientos de cada personaje. Hay que mirar los movimientos en el manual de papel que acompañaba a la edición física del juego.
Gráficamente es genial, con un diseño de los personajes que es el de la serie de televisión y el cómic de los 90 y con distintos escenarios reconocibles como la Sala de peligro, el satélite de Magneto, Avalon, la Tierra Salvaje, o encima del avión de los X-Men, el Blackbird.
En definitiva es un juego muy divertido pero tan limitado como eran en la época en que no se planteaban incluir una historia y así solo hay dos modos de juego, el Arcade y el Versus.
Sin embargo, sigue siendo una gozada jugarlo y todo un contraste tener un juego dedicado a los X-Men después que en el último Marvel Vs. Capcom Infinite no hubiera ni un solo mutante.
Muy divertido y recomendable, aunque sea tan parco en opciones.